El facultativo especializado en medicina de familia y portavoz del Comité de huelga de los médicos de Atención Primaria, Jesús González Puga, responde a El Faro acerca de la situación existente entre los sanitarios de nuestra ciudad.
Esta entrevista se realizó el pasado jueves, mientras se desarrollaba en Madrid la Mesa Sectorial entre los sindicatos médicos y el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa).
- ¿Se han tenido que suspender consultas debido a la huelga?
- La huelga es el último punto al que se debería llegar, pero es que la situación está paralizada, vemos que pasan los meses y no hay un avance.
En la primera huelga se suspendieron el noventa y cinco por ciento de las consultas, mientras que en la segundo paro de Atención Primaria, las consultas clausuradas estuvieron entorno al cuarenta por ciento.
Si es verdad que las particularidades de la Atención Primaria, tanto de los médicos de familia como de los pediatras, hacen que el día que un médico se ponga de huelga significa que el día siguiente vea al doble de pacientes. Esto es porque, al no haber lista de espera, al día siguiente acuden los pacientes que no han sido vistos ese día.
A ello también se suma que casi un veinte por ciento de los médicos están de vacaciones o de baja y no están siendo sustituidos.
Los servicios mínimos los ocupan dos médicos y un pediatra, que además sí están de acuerdo con la huelga, con la movilización y con las reivindicaciones. Las reivindicaciones que tenemos desde la plataforma las han firmado todos los médicos y todos los pediatras de Atención Primaria de Melilla, excepto dos médicos de familia, entonces el éxito de la movilización podemos cifrarlo entorno a un noventa y cinco por ciento, porque los médicos que están de servicios mínimos están de acuerdo con la huelga.
- ¿Qué le dicen sus pacientes acerca de los paros?
- En general creo que que los pacientes entienden esta situación, porque lo ven en los pasillos y lo ven también en el día a día. Hay consultas saturadas y los pacientes lo deben de entender.
Esto no es una una lucha por dinero, esto es una lucha por la atención clínica, por dar una buena atención a los pacientes en tiempo y forma. Cosa que, actualmente, incluso desde hace tiempo, no se ha podido hacer como los propios profesionales querríamos debido a la carencia de médicos en la ciudad.
-¿Por qué ha decidido ser el portavoz de los sanitarios de Atención Primaria en huelga?
- Llevo veintidós años de médico de familia en el centro de salud de Cabrerizas, con la presión asistencial que tiene este centro. Conozco a todos los compañeros de Melilla y he podido ser el portavoz y el coordinador como podía haberlo sido otro.
Simplemente, un día empecé a buscar lo que estaban haciendo en otras comunidades autónomas y lo plasmamos en un documento. Hicimos una plataforma coordinada con un representante por cada centro de salud y un representante de Pediatría. También consensuamos el documento que hemos enviado a prensa, a la Dirección Territorial, a la Dirección Médica de Primaria y al Ingesa en Madrid.
Como coordinador y como portavoz he estado yendo a las reuniones. Estas se realizan desde enero y han sido fluidas y con ganas de solucionar el conflicto. Pero ha habido puntos que creíamos solucionados en Melilla pero no se han podido solventar debido al 'muro' del Ingesa en Madrid que, aunque ha habido varias entrevistas con ellos, todo tiene que pasar por Mesa Sectorial.
- ¿Por qué deciden movilizarse desde la Atención Primaria?
- Todo surgió porque veíamos que en el resto de la península se estaban movilizando. En la Atención Primaria estábamos estancados y aplanados, teníamos lo que se conoce como un 'aplanamiento afectivo'. Habíamos desprestigiado nuestra propia consulta de día a día.
La especialidad de medicina de familia conlleva mucho trabajo y mucha gestión, así como prevención y atención continuada del paciente y esto no se estaba dando por los tiempos que teníamos por paciente, de cinco minutos, además de por la demanda tan intensa.
El Sindicato Médico de Melilla, al que están afiliados la gran mayoría de los médicos de Atención Primaria, nos ha apoyado desde siempre. También nos han dado su apoyo otros sindicatos, como CSIF, porque son las mismas reivindicaciones de otros centros, de otras comunidades y de otros sindicatos.
- La Atención Primaria de toda España tiene problemas, ¿Hay algún problema particular en Melilla?
- Melilla tiene unas particularidades concretas y encima más complicadas como es la insularidad. Además de una escasez muchísimo más agravada de médicos en la plantilla de Primaria.
- En un plano más personal, ¿esta huelga le ha afectado a su salario?
- En Primaria hemos hecho movilizaciones diarias a las 11:00 horas frente a cada centro de salud para visualizar el problema que hay, además de las dos movilizaciones que se han hecho para la población general.
Con respecto a la huelga, los médicos y pediatras de Primaria hemos hecho estas dos huelgas y sí, nos ha afectado al salario porque te descuentan una parte proporcional del sueldo, pero bueno, creo que había que hacerlo para despertar un poco y ver que estamos todos 'en el mismo barco' de querer llevar la calidad y la medicina de la Primaria a a los niveles óptimos que la población merece. Esto es inversión en personal, en médicos, inversión en tiempo, en calidad, en los trabajadores y, sobre todo, en calidad a los usuarios.
Hay que adecuar las plantillas para que los médicos tengan unos cupos recomendados de 1.500 pacientes y se ofrezca una atención de calidad. Además, tienen que venir ya los tres médicos aprobados por el Ingesa para ampliar la plantilla, así como consensuar agendas de treinta y dos más seis pacientes por día y 'desburocratizar' la consulta diaria de Atención Primaria. Creo que eso es la parte fundamental de todo.