El viceconsejero de Juventud de la Ciudad, Jesús García, dijo que el éxito de la actividad se debe al aumento de la superficie de la iniciativa, entre otras causas.
La pista de hielo instalada por la Viceconsejería de Juventud de la Ciudad Autónoma para las pasadas vacaciones navideñas “recibió cerca de 5.000 visitantes en la presente edición”, tal y como confirmó el responsable de este área, Jesús García, a ‘El Faro’.
El éxito de la iniciativa del pasado año reside, probablemente, a tenor de lo dicho por García en “que las dimensiones de la superficie destinada a practicar el patinaje sobre hielo se ha ampliado respecto a otros ejercicios, lo que implica que puedan participar en la actividad un mayor número de melillenses”.
Otra de las innovaciones de las que han podido disfrutar los usuarios de esta atracción durante el pasado año fue el del alquiler o adquisición de unos guantes para evitar daños innecesarios en el momento en el que se produjese alguna caída, habiendo sido el precio del alquiler de un euro, mientras que aquéllos melillenses que quisieron comprarlos para posteriores usos, debieron abonar dos euros.
Los pequeños, tal y como prosiguió García, “tuvieron la oportunidad de subirse a unos trineos adquiridos por la Ciudad Autónoma para facilitar el patinaje sobre hielo”.
Colectivos Sociales
La pista de hielo también fue utilizada, durante la mañana, concretamente de 10:00 a 11:00 horas, por los distintos colectivos sociales existentes en la ciudad y entre los que se encontraban los usuarios de la Purísima, el Baluarte, la Cruz Roja, Cáritas y demás entidades.
“Por supuesto, estos sectores de la población melillense no ha tenido que abonar nada para hacer uso de la pista de hielo”, expuso el viceconsejero de Juventud de la Ciudad Autónoma.
En otro orden de cosas, la intención de la Viceconsejería de Juventud es “volver a traer a la ciudad la pista de hielo para que los jóvenes de la ciudad puedan practicar este deporte” durante las vacaciones de Navidad y ofrecer a estos melillenses un atractivo más, de los ya existentes, para pasar el extenso tiempo de ocio del que disponen durante la segunda quincena del mes de diciembre.