Los trabajos de construcción del pabellón del campus universitario de la UGR, están parados. Y ello, según la consejera de Presidencia y Administración Pública, Gloria Rojas, por problemas económicos derivados de la universidad andaluza. "Hay problemas económicos porque los materiales se han encarecido mucho y no hay donde conseguirlos", apuntó.
Según Rojas, todos los trámites y demás acciones relacionadas con la construcción de las instalaciones deportivas "están hechos" por la Universidad de Granada, a la espera de la puesta en marcha. En este caso, la Ciudad Autónomas solo pone sobre la mesa una tercera parte del coste de las nuevas infraestructuras universitarias.
La consejera socialista aseguró a este respecto que todas las partes tienen "buena disposición" para encontrar soluciones.
Hace un año
El próximo día 23 de abril se cumplirá un año desde que se colocó la primera piedra del pabellón, un acto en que estuvieron presentes todos los responsables públicos de los gobiernos local y central, encabezados por la delegada, Sabrina Moh.
Sin embargo, hace meses que las obras quedaron paradas. Todo parece indicar que la empresa encargada de la construcción, Acciona Construcción SAU, aumentó los costes de los trabajos en un 30% como consecuencia de la subida de precios. A partir de ese momento, todo quedó en suspenso.
La decada de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte de la UGR, Lucía Herrera, siempre ha expresado su convencimiento de que las obras se retomen lo antes posible. En ese sentido, ha venido apuntando que las partes están trabajando en el tema.
La construcción del citado pabellón en el campus universitario está financiada por el Ministerio de Educación, la Universidad de Granada y la Ciudad Autónoma de Melilla. La primera piedra se colocó el 23 de abril del pasado año 2021 e inicialmente el plazo de ejecución era de 15 meses.
La URG , ha comprado recientemente por tres millones de euros, la antigua azucarera de Bobadilla en Granada, y ha recibido dinero extra al que tenía ya presupuestado de la Junta de Andalucía.
En mi opinión para la URG, somos como se suele decir cascarilla, y nos tiene presentes solo para las fotos, contentándonos de vez en cuando con las sobras, en vez de ver el potencial que tiene al otro lado del charco.