El Colegio Oficial de Médicos de Melilla denuncia el vacío legal que se genera con los "positivos detectados por test de antígenos", a la vez que reiteró su compromiso con la exigencia de pedir el pasaporte covid para acceder a lugares cerrados.
La entidad entiende que se debe garantizar la equidad y la igualdad entre todos los ciudadanos. Considera que "la medida se ha impuesto sin claridad y sin solución a circunstancias reales, como dar respuesta a aquellos positivos por test de antígenos que no han podido vacunarse aún y que, por lo tanto, tampoco han podido obtener el pasaporte covid".
Su presidente, Justo Sancho-Miñano, ha alertado que aunque les "parece muy bien" que las autoridades exijan ese certificado "deben hacer todo lo posible para que todos los ciudadanos tengan la capacidad de tenerlo y no es así. Por lo tanto empiezan a afectar derechos fundamentales".
El comunicado de prensa del referido colegio afirma que el conflicto llega con los positivos detectados por test de antígenos, ya que para obtener el pasaporte covid digital de la Unión Europea el solicitante tiene que "haber sido vacunado contra la Covid-19, se haya realizado una prueba con resultado negativo o haya superado esa enfermedad.
Incongruencias con pasaporte covid
Aclara que a muchas personas les han diagnosticado en vez de PCR test de antígenos, y estos últimos no son válidos para realizar el referido trámite. Puntualiza que "es ahí donde se dan situaciones incongruentes, puesto que los test de antígenos si sirven para certificar los positivos diarios pero no habilitan para la obtención del certificado al tener que esperar seis meses hasta la vacunación".
El Colegio considera que ello genera una falta de soluciones reales, pues si alguien que resulta positivo por test de antígenos el 1 de septiembre, no podría vacunarse hasta marzo, por lo cual sus datos no constarían en Salud Pública hasta esa fecha y estaría impedido de "tener certificado covid así como acceder a ningún lado" y entonces "se le vulneran sus derechos fundamentales".
También se le vulneran sus derechos fundamentales a quien no quiere vacunarse por la razón que sea.