La Semana de la Movilidad arranca este fin de semana con la finalidad de concienciar a la sociedad melillense de la necesidad de procurar un transporte sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Melilla es una ciudad con una tasa de vehículos por habitante disparada y donde, debido a sus dimensiones, el uso de la bicicleta o simplemente andar, debería ser mucho más habitual de lo que es.
La ciudad ha estado durante años orientada al uso de los vehículos a motor, con las nefastas consecuencias que estos tiene para nuestro entorno y para nuestra calidad de vida.
Es preciso que las autoridades tomen una determinación y apuesten decididamente por los modelos de movilidad y de ciudad que se están imponiendo en el resto del territorio nacional, en los que el coches son una opción que está siendo sustituida por otros medios de transportes más racionales y ecológicos.
La celebración de la Semana de la Movilidad no debe convertirse en un echo puntual al que arrimarse una vez al año, sus fundamentos deben ser un compromiso firme y mantenido en el tiempo que sean aplicados para mejorar la vida de los habitantes de Melilla.
La Semana de la Movilidad debe durar todo el año.