La Asociación Unificada de Guardias Civiles de Melilla se ha sumado a la concentración que ha habido este mediodía en la Puerta del Sol en Madrid, a la que ha acudido responsable territorial, Sergio Márquez. La propia AUGC ha explicado que el objetivo es concienciar a la ciudadanía de la falta de derechos y precariedad en las condiciones sociolaborales de los trabajadores de la Guardia Civil. Por otro lado, también quieren trasladar a los grupos políticos y el Gobierno la necesidad de poner remedio a dichas precariedades y discriminaciones de manera inmediata.
"De este modo, el Kilómetro Cero se ha convertido en el punto desde el que los trabajadores de la Benemérita han querido transmitir a la sociedad española que todavía siguen siendo ciudadanos de segunda, privados de derechos básicos como el de sindicación, o incluso de poder contar con una jornada laboral digna que les permita la conciliación familiar", expresaron en el comunicado.
Aseguran que los guardias civiles todavía no cuentan con una jornada laboral digna, con turnos de trabajo que permitan conciliar; afirman que el reparto de la Productividad premia a los altos mandos y deja las migajas a los agentes; señalan que pueden ir a la cárcel por una discusión laboral; sus representantes asociativos son represaliados; que no tienen derecho de sindicación y que faltan medios humanos y técnicos, entre más asuntos.
En un comunicado, relataron que el acto, que ha transcurrido en un ambiente festivo, y en el que han estado presentes también numerosos familiares de los guardias civiles, ha contado con las intervenciones de Fernando Carrillo y Joan Miquel Perpinyà, secretarios generales de AUGC entre 2002 y 2006, y 2006 y 2008, respectivamente. Tras sus alocuciones, muy aplaudidas, ha tomado la palabra el actual secretario general de AUGC, Juan Fernández, el cual ha comenzado señalando que, de nuevo, la Asociación Unificada de Guardias Civiles ha salido a la calle "para reivindicar democracia y dignidad. Para reivindicar lo que es de justicia para los guardias civiles. Que la Guardia Civil no sea tratada como un cuerpo policial de segunda"
A continuación, Fernández se ha preguntado "¿Dónde está el ministro del interior? ¿dónde están las promesas de modernizar y avanzar hacia una Guardia Civil del siglo XXI donde tengamos el reconocimiento profesional, social y económico que merecemos? ¿Dónde está el cumplimiento íntegro del acuerdo de equiparación salarial".
El secretario general de AUGC ha recordado que los guardias civiles "llevamos meses, años, con pruebas y más pruebas; con promesas y más promesas, incluso con el incumplimiento de normas que dicen que los guardias civiles tienen derecho a una jornada laboral digna, con turnos de trabajo rotatorios, al igual que cualquier servicio de emergencias y por supuesto al igual que el resto de cuerpos policiales. Y no solo se debe implementar la misma jornada laboral en sus turnos, sino que se debe homologar la realización del mismo número de horas de servicio anuales entre Guardia Civil y Policía Nacional o cuerpos policiales autonómicos. ¿Por qué tienen que seguir siendo los guardias civiles quienes más horas trabajen y peor remuneración reciban?"
También ha señalado que, además de todo lo citado, queda otra cuestión pendiente, "y es el complemento de productividad. Los guardias civiles y sus familias saben muy bien de qué hablamos. Queremos que la penosidad del servicio nocturno y festivo sea justamente remunerada, queremos que esas Nochebuenas, Nocheviejas, esos días de Reyes que no podemos estar con nuestras familias, con nuestros hijos, no se paguen de la forma tan ridícula e insultante".
El secretario general de AUGC ha insistido en realizar un llamamiento al ministro del Interior para que se reúna con los guardias civiles y demuestre si de verdad desea trabajar por una Guardia Civil democrática, transparente y moderna, donde sus trabajadores disfruten de los mismos derechos que el resto de funcionarios públicos. En este sentido, durante el acto los asistentes han coreado en repetidas ocasiones la palabra 'sindicato', reclamando su derecho a constituirse en uno de pleno derecho.