El Melilla Sport Capital Torreblanca B de la Segunda División Nacional de fútbol sala femenino, sumó los tres puntos en el último de los partidos de la primera fase, tras derrotar en un partido de infarto al cuadro granadino del Monachil por el resultado de 5-4, en un partido donde a pesar de que las melillenses siempre fueron por delante en el electrónico, siempre estuvo la incertidumbre de quien se llevaría los tres puntos en juego.
El partido comenzó a la perfección para el cuadro de nuestra ciudad puesto que cuando se cumplió el minuto 2, se realiza un pase en profundidad y la capitana melillense Lubna colocó el 1-0. Un minuto más tarde, Delise puso a su equipo con el 2-0. A pesar de este resultado, las visitantes no cambiaron su guión de juego que era defenderse a la perfección para salir en rápidos ataques. Un mal despejo melillense fue aprovechado por el cuadro granadino para aminorar las distancias en el electrónico y ponerse con el 2-1. La escuadra de nuestra ciudad controló en todo momento el ritmo del partido viéndose numerosas oportunidades claras que fueron falladas por auténtica mala suerte. En el minuto 10, Aixata tras el robo de un balón puso el 3-1, con mucha tranquilidad, haciendo su primer gol de la presente temporada. A pesar de las ocasiones habidas, el marcador no se movería más durante este primer tiempo.
Tras la salida de los vestuarios, el cuadro visitante salió mucho más enchufado lo que se reflejó en el marcador ya que durante los primeros compases de este periodo logró sumar dos goles para poner el marcador el 3-3.
En el minuto 25, sacó a relucir Nerea su la velocidad y el regate para poner a las Guerreras por delante con el 4-3. El Monachil lejos de bajar los brazos intentó de todas las maneras posibles el gol del empate que llegaría en el minuto 27. Nerea volvió a aparecer en escena para sumar un nuevo gol y poner a su equipo con el 5-4. Los dos equipos se volcaron en el área rival para sumar más goles, pero no se movió el marcador del Lázaro Fernández ya que los tres puntos se quedaron en tierras melillenses.