El diputado de Melilla por el PP en el Congreso de los Diputados, Fernando Gutiérrez Días de Otazu, valoró que las solicitudes del Ingreso Mínimo Vital en Melilla, también en el resto del país, no terminan de procesarse por "La falta de liquidez" en las arcas públicas. Otazu explicó que, tras una pregunta parlamentaria, el Gobierno central informó que en Melilla han sido admitidas el 30% de las solicitudes y no admitidas el 20%. Así pues, las que quedan por resolver, Otazu dijo que no pensaban que las razones fuesen las que da a entender el Ejecutivo de que son razones administrativas las que ralentizan los procesos del IMV.
Por otro lado, el popular tildó de "irrespetuosas" el tono y los adjetivos que expresó el consejero de Infraestructuras, Urbanismo y Deporte, Rachid Bussian, se refirió al presidente del PP melillense, Juan José Imbroda. Otazu reprochó que Bussian realizase dichos comentarios desde el puesto de un responsabilidad institucional. Acusó al consejero de "deriva totalitaria" y señaló que extendió "los improperios y excesos verbales" al resto de los miembros del PP, llamando a la oposición "bastarda" porque, según Otazu, el consejero estima que los populares formulan "demasiadas preguntas" en los distintos plenos de la Asamblea.
Además, Otazu criticó que Bussian cuestionase la utilidad de los tres parlamentarios que representan a la ciudad en las Cortes Generales y dijo que no va a entrar en calificativos al consejero, pero que pidió "por higiene y respeto a los ciudadanos algo de mesura y control en el empleo de la lengua para que dé la impresión de que es nuestra mente la que la controla y no lo contrario", dijo.
Añadió que las preguntas, las observaciones o las propuestas alternativas a los dirigentes institucionales "son una obligación democrática" y entiende que resultan molestas o incómodas a responsables democráticos "manifiestamente antidemocráticos, que son los que las cuestionan".