‘La luz de Melilla’ es el nombre del cartel que anuncia los cultos en honor a Nuestra Señora de la Victoria, Patrona de la ciudad. Manuel Jiménez gana por cuarto año consecutivo este certamen de fotografía o composición en el que se busca la mejor imagen para dar a conocer todos los actos que se preparan para honrar a la Alcaldesa Perpetua de Melilla.
El encargado de presentar este acto fue el padre Manuel Jiménez Bárcenas, arcipreste de Fuengirola y que muchos melillenses conocerán porque llegó a ser vicario de Melilla hace unos años.
Él describió el cuadro de la Patrona recalcando cada detalle y subrayando que esa luz que es protagonista es también la verdadera fe de los melillenses.
Jiménez ofreció un discurso en el que dio un repaso a sus cinco años de sacerdote en Melilla y a sus recuerdos de esta ciudad, como el té con jeringos o los perritos de corvina. Contó que en su parroquia actual, en Fuengirola, encontró nada más llegar la imagen de una Virgen del Carmen que fue regalada por la Cofradía de Pescadores de nuestra ciudad a los mineros de las compañías que operaban en el Rif. También describió cómo recuerda el Día de la Patrona y cómo vivió cada minuto de la última procesión.
Concordia entre hijos
Por su parte, el vicario episcopal de Melilla, Eduardo Resa, también intervino en este acto y aseguró que el mejor regalo que se le puede hacer a una madre, como la Virgen de la Victoria, es que todos sus hijos se lleven bien, cada uno con sus diferencias, que compartan sus asuntos de trabajo, sus alegrías y sus penas. Afirmó que así se logra una ciudad donde hay respeto, tolerancia y libertad religiosa.
Además, pidió a las autoridades y llamó la atención de todos los presentes para que trabajen en lograr que un día la Patrona pueda volver a su casa, la iglesia de La Purísima en Melilla La Vieja. Espera que algún día pueda rezar allí a la Virgen de la Victoria.
El cartel
José Manuel Lozano explicó a El Faro que el pasado año llovió justo el día de la procesión de la Patrona. Eso ha dificultado mucho encontrar buenas fotos que presentar al concurso que organiza la Hermandad de la Virgen de la Victoria. Pero hay un segundo apartado en este certamen y es el de composiciones. A esto último se dedicó para dar con una imagen que defina bien lo que siente por la Patrona y lo que cree que significa para los melillenses.
El ganador del concurso del cartel destacó que se puede ver el faro de Melilla La Vieja en un amanecer y a la Virgen. De ahí que se haya nombrado ‘la luz de Melilla’ en referencia a que la Patrona ilumina y protege a la ciudad como también da luz el faro que hay entre las murallas. Asimismo, ha querido recoger una estampa de El Pueblo, la sede de Nuestra Señora de la Victoria, aunque en estos momentos se encuentre en la iglesia del Sagrado Corazón.
Lozano explicó que siente como una ‘obligación’ el participar en el certamen del cartel de la Patrona. Aseveró que no lleva el trono y es una forma de aportar su granito de arena para dar difusión y formar parte de las personas que contribuyen a que la Patrona esté más arropada.
Música de la Flagelación
Es presidente de Photowalk, una asociación de fotógrafos aficionados a los que anima e insiste en que participen en la procesión de la Virgen de la Victoria para sacar sus fotos y luego poder concursar en este certamen. Como nunca van solos, porque siempre les acompaña la familia, al final aportan también que haya más personas acompañando a la Señora de Melilla por sus calles.
Pero este fotógrafo aficionado, que se define de los de menor calidad entre sus compañeros, subrayó que la ciudadanía tiene que implicarse más en los actos de la Patrona. Recordó que no solo es el motivo por el que contamos con Fiestas Patronales. Para él, sin importar el credo o la política, los melillenses deberían participar más en estas actividades en las que la hermandad invierte muchas horas al año para su celebración.
Además, en este acto se contó con la música de la Agrupación Nuestro Padre de la Flagelación e interpretó varias marchas, como ‘Y al tercer día’ y ‘Caridad del Guadalquivir’.
