Ciudadanos Melilla, que ve “un problema bastante importante” con el agua en la ciudad, ha desgranado este miércoles las medidas incluidas en su programa electoral para atajar dicha cuestión.
El número 3 de la candidatura naranja ha empezado su argumentación afirmando que el agua, además de “un bien fundamental para el ser humano”, es “un bien escaso en algunas zonas”, también en Melilla, donde hay “escasez”.
Luis Escobar ha destacado el consumo “absolutamente exagerado” que registra la ciudad autónoma: “La media de consumo a nivel nacional es de 136 litros por habitante y día, mientras que la media de Melilla es de 309, según la Consejería de Medio Ambiente, y de 396 según alguna organización ecologista”.
“Consumo exagerado”
A pesar de que el consumo local de agua asciende al “triple” del nacional, Escobar ha recordado que “hay personas en Melilla que abren el grifo y no sale nada”.
Cs baraja dos causas para ello. Por un lado, “que existen 10.000 personas no controladas, no censadas, que están consumiendo agua”. Por otro, “que no haya un control de las fugas en la red de distribución o bien en el consumo de agua”, algo que la formación naranja ve como “la más probable”.
Control de fugas
Ciudadanos defiende la construcción del cuarto módulo de la desaladora, aunque pone peros: estima que “podría paliar algo, pero no es la solución del problema”.
Según ha expuesto Escobar, “el problema está en el consumo y en el control de las fugas; y también en la falta de voluntad política” del Gobierno para controlar la situación.
Tuberías rotas o con amianto
La receta de Cs pasa por cuatro puntos. Para empezar, “una rehabilitación completa de la red de distribución de agua”. El partido naranja pide hacer “hincapié, sobre todo, en aquellas tuberías que por el paso del tiempo están deterioradas, rotas o que tienen partículas de amianto, que son perjudiciales para la salud”.
La hoja de ruta continuaría haciendo un “seguimiento exhaustivo de la red por zonificación y mediante telecontrol”, lo que implicaría instalar “unos sensores eléctricos que avisan de dónde se producen fugas que quizás los servicios operativos o los vecinos no pueden detectar”. Ello, además de detectar fugas, permitiría “saber se está produciendo un consumo exagerado”.
Premiar el ahorro
La tercera medida de la lista que lidera Eduardo de Castro pasa por “ayudar a aquellas comunidades, sobre todo las que menos recursos tengan, a la instalación y mantenimiento de aljibes y bombas de presión mientras no se arregle la red de distribución”.
En último lugar, y también para mirar por el medio ambiente, Cs apuesta por “revisar la facturación, es decir, los tramos que hay y poner uno bastante económico” que cubriría “hasta el consumo medio nacional, los 136 litros por habitante y día”.
A partir de ahí, se pagaría un extra. El objetivo de esta medida es doble: “Pagar todo lo que es el exceso de consumo y, por la otra parte, bonificar a aquel que no llegue a ese consumo mínimo”, lo que reflejará “que está haciendo un ahorro y concienciándose con el problema”, ha concluido Escobar.