La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas acusadas de querer ‘colar’ 100 kilogramos de polen de hachís en los barcos que unen Melilla con la península.
Los arrestados son un melillense de 20 años, un madrileño de 68, un toledano de 30 y un marroquí de 43 años. Tres de ellos han ingresado en prisión.
Según informó ayer el Instituto Armado, las detenciones se llevaron a cabo el jueves y el viernes de Semana Santa.
Tres de los detenidos pretendían subir al barco con la droga oculta en dobles fondos en sus vehículos, mientras que el melillense de 20 años llevaba un kilo de polen de hachís adosado a los muslos y debajo de las axilas.
El primero de los arrestos se produjo el jueves 24 a las 14:20 horas, en el preembarque del buque que partía hacia Almería.
El perro detector de drogas ‘marcó’ un Toyota Corolla, conducido por un toledano de 30 años: llevaba 77 paquetes de droga que pesaban 19 kilos.
La segunda actuación tuvo lugar, ése mismo jueves, diez minutos más tarde. A otro Toyota Corolla le hallaron 54 kilos de hachís ocultos en dobles fondos en las faldillas, vigas del chasis y el salpicadero. El vehículo iba conducido por un madrileño de 68 años, que fue detenido.
El tercer detenido, un melillense de 20 años, cayó cuando pretendía subir al barco de Málaga con 1 kilo de polen debajo de las axilas y adosado a los muslos.
Por último, la Guardia Civil halló 28 cajas metálicas herméticas en el depósito de combustible de un coche conducido por un marroquí. Llevaba: 29 kilos de hachís.