El River Melilla perdía el pasado sábado una gran oportunidad de abandonar los puestos de descenso al caer ante un rival de mitad de la tabla como el Martos.
Un equipo que supo adaptarse mejor que el norteafricano a las condiciones meteorológicas que reinó el pasado fin de semana en Melilla. El partido tenía pinta de acabar con el empate inicial, pero los visitantes se mostraron muy efectivos de cara a la portería local al aprovechar dos de las escasas ocasiones que generaron. Paco Carmona, técnico del conjunto melillense, valoró al término del choque lo que había sido el partido. “Ha sido uno de estos partidos en los que el rival no ha sido superior a nosotros, pero en el que tampoco hemos sabido ser superiores. El primer tiempo se ha desarrollado más o menos como habíamos previsto. Ellos jugaron con el viento a favor y nosotros evitamos que nos hicieran gol, pero es que en el segundo tiempo el gran problema es que no hemos tirado ni un tiro a puerta. Si no tiramos a puerta y no colgamos un balón a pesar de estar jugando con dos delanteros centros como Hamete y Chota que lo que necesitaban era que les llegaran balones y no les llega, pues mal asunto. Y luego, dos fallos puntuales que nos cuestan dos goles y ahí ha estado el partido”, valoró Francisco Carmona.
Jornada vital
El entrenador del conjunto ribereño reconoció que el Martos se adaptó mejor que su equipo al fuerte viento de Poniente que reinó a lo largo de todo el encuentro. “No hemos sabido jugar ni a favor ni en contra del viento. Cuando hemos estado en contra del viento lo único que hemos hecho ha sido mantener a cero nuestra portería, aunque más o menos era el único objetivo que te podías marcar, para, en el segundo tiempo, apretar con la ayuda del viento. Pero hemos jugado un partido insulso, y en la segunda parte no hemos generado nada”, significó Paco Carmona.
Para el preparador albinegro el problema de su equipo no lo constituyó únicamente el abusar del juego directo cuando dispuso del viento a favor. “El problema no ha sido solo el juego directo, porque si hubiéramos hecho un juego directo con el que buscásemos el cabeceo de uno de los delanteros hubiera estado bien; pero es que el juego directo lo hemos hecho hacia las bandas y ahí no era efectivo. Nos hemos equivocado”, apuntó.
Tras la derrota no queda otra que seguir trabajando, puesto que aunque los resultados no acompañaron del todo, el equipo podría salir este fin de semana del descenso si vence en La Espiguera a un rival de su liga particular como es la UD Maracena.
“Así es. Toca seguir trabajando y peleando hasta el final. Hasta que los puntos no te digan que te vas para casa, vamos a seguir intentándolo. Sabemos que la cosa está difícil pero vamos a seguir trabajando para intentar seguir en la categoría”, aseguró.