Emilio Guerra plantea “incentivos” para los funcionarios que coloquen a desempleados.
El candidato por Melilla de UPyD al Congreso de los Diputados, Emilio Guerra, planteó ayer entre las promesas electorales de su partido que el Servicio Público de Empleo “actúe como cazatalentos”.
Guerra explicó que esa tarea consistiría en que “los funcionarios salgan a la calle con incentivos para la colocación de desempleados”. De esta forma, a su parecer, se mejoraría “la labor intermediaria del Servicio Público de Empleo”.
El dirigente local de UPyD reveló que esta práctica se viene llevando a cabo “con cierta eficiencia y éxito en países como Alemania y Dinamarca”.
Guerra dedicó su rueda de prensa de ayer a analizar la situación económica existente en el país tras cuatro años de legislatura del Partido Popular.
Desde su punto de vista, el panorama “no es muy halagador, por mucho que traten desde el Gobierno de vendernos que vamos por la senda del crecimiento y que nuestro motor económico se ha reactivado”.
El dirigente de la formación magenta en Melilla estimó que “nos engañan continuamente con cifras maquilladas de parados”.
Guerra afirmó que “realmente” los datos de afiliación a la Seguridad Social son “negativos” y que se ha registrado un “enorme descenso” en la población activa.
Caída de la población activa
“Desde que el PP llegó al Gobierno de este país la población activa se ha reducido nada más y nada menos que en 540.000 personas” afirmó el aspirante al Congreso por UPyD.
“¿Dónde están?”, se preguntó Guerra para responderse a continuación: “Los han sacado a empujones del sistema. Los han expulsado, han emigrado o ya no tienen ilusión ni ganas de apuntarse a la lista del paro. Ya no se cuentan. Es así de claro”, aseguró el candidato al Congreso.
Guerra añadió que el programa de UPyD propone el “contrato único indefinido con indemnización creciente por despido”. Justificó esta propuesta en que permitirá “incentivar la contratación, aumentar la competitividad, mejorar la formación de los empleados, facilitar la lucha contra el fraude laboral y acabar con la brecha tan enorme entre trabajadores fijos y trabajadores temporales”.
Aparte, prometió la implantación de la “mochila austriaca”, una fórmula que permite al trabajador “conservar las indemnizaciones por despido acumuladas al cambiar de empleo”. De esta forma, según Guerra, se facilitará el “cambio voluntario del puesto de trabajo”.