La víctima afirma que tiene miedo de su marido y quiere divorciarse de él.
Se disponía a preparar el desayuno, pero la noche anterior, su marido le había pegado y tenía miedo. Se encerró en una de las habitaciones durante todo el día, pero por la tarde su pareja cogió el palo de la escoba y la golpeó. Huyó a la calle, llorando y un vecino llamó a la Policía. Ése es el relato que una mujer, de nacionalidad marroquí, ofreció ayer a la juez de lo Penal 2 sobre la agresión sufrida por parte de su marido.
El acusado, para el que la Fiscalía pide 12 meses de prisión, se negó a declarar, por lo que únicamente prestó declaración la víctima sobre lo ocurrido el pasado 27 de abril en el domicilio familiar en Padre Lerchundi. La mujer explicó que se casó en Marruecos con el acusado hace siete años y tienen tres hijos. Afirmó que su intención es divorciarse, especialmente, tras este episodio de maltrato. Aseguró a la juez que tiene miedo de su marido porque no es la primera vez que la maltrata.
La víctima indicó que los golpes recibidos en la cabeza le provocaron un hematoma en la cara. Con el palo de la escoba recibió golpes que le dejaron señales en el muslo derecho. El caso quedó visto para sentencia.