Solamente los de Ceuta y Cádiz tienen precios más bajos, según un informe
de FACUA.
Melilla cuenta con una de las tarifas de taxi más bajas de todo el territorio nacional, según un informe de FACUA-Consumidores en Acción en el que se analizan los precios del sector en las principales ciudades españolas. De hecho, este servicio de transporte en Melilla es el tercero más barato de todo el país, pues únicamente Cádiz y Ceuta cuentan con tarifas más bajas.
En concreto, en la ciudad autónoma se cobran las carreras cortas, de un kilómetro o menos, a 3,20 euros en la tarifa de día, a 4,20 euros la de noche y a 5,20 la de fines de semana y días festivos. En lo tocante a los trayectos medianos, inferiores a cinco kilómetros, el precio es de 5,30 euros en horario diurno, 6,30 euros por la noche y 7,30 en fines de semana y festivos. Por último, en los desplazamientos que superan los 10 kilómetros, los precios son de 9,30 euros de día, 10,30 euros de noche y 11,30 euros los fines de semana y festivos.
Se trata de una cifras ostensiblemente más bajas que en la inmensa mayoría de ciudades de la península. Por poner un ejemplo, en Tarragona, que cuenta con las tarifas más caras del país, se cobra a 4,99 euros la carrera mínima, por un desplazamiento inferior a un kilómetros, lo que supone 1,70 euros más que en Melilla.
La diferencia es aún mayor en trayectos largos y con el plus de los fines de semana, pues en Tarragona el coste es de unos 18,12 euros, frente a los 15,5 euros de San Sebastián o 14,2 euros en Girona, mientras que en Melilla el precio es de 11,3 euros.
Algo similar ocurre con la bajada de bandera, que en la ciudad autónoma cuesta 1,30 euros en horario de día y 2,30 de noche, de los precios más bajos del país, únicamente superados por Ceuta donde la bajada de bandera se cobra a 0,90 euros de día y 2,10 de noche.
Tres años congeladas
Una de las claves para que las tarifas de Melilla sean de las más baratas es que llevan tres años congeladas, según explicó ayer a El Faro el presidente de la Asociación de Autónomos del Taxi de Melilla, José Antonio López. Además de no haber tocado los precios desde el 2011, no existe intención alguna de subirlos a corto y medio plazo.
Los profesionales del sector temen que un incremento de las tarifas “asuste” a la clientela y se produzca un descenso en el número de usuarios. “Creemos que con la crisis no sería bueno subir el precio. Ahora mismo es algo que ni siquiera nos planteamos”, subrayó López.
Los visitantes, sorprendidos
El máximo dirigente de la Asociación de Autónomos del Taxi reseñó que los melillenses están acostumbrados a los precios que hay a nivel local y no aprecian tanto lo baratos que son, algo que sí hacen los visitantes que llegan de la península. “Hay muchos turistas que nos dicen que las tarifas son muy bajas con respecto a las de otras partes de España. Sin embargo, los que son de aquí no lo notan tanto, porque están acostumbrados”, explicó López.
Por otro lado, reseñó que la situación en el sector es “bastante mala”, principalmente a causa de los ‘taxis piratas’, que roban clientes tanto a la COA como a los conductores que sí tienen licencia para prestar este servicio de transporte público.
“Hay que tener en cuenta que en Melilla hay más de 200 piratas y únicamente 60 taxis legales. La competencia desleal es tremenda. Hay días en los que dan ganas de tirar la toalla”, lamentó. “Por muchas medidas que se tomen para luchar contra ellos, es casi imposible eliminarlos por completo”.
Desde la asociación esperan que la llegada de las navidades traiga un incremento de clientes, sobre todo gracias a las comidas de empresa y las familiares. “Son encuentros en los que se suele beber y luego la gente no quiere coger el coche, así que tenemos más clientes que de costumbre”, detalló.
Además, resaltó que la paga extraordinaria de los funcionarios también repercute para bien en el sector del taxi.
