La Guardia Civil ha interceptado a 6.200 inmigrantes en la costa, en Melilla y en Ceuta
La Guardia Civil ha interceptado en lo que va de año a alrededor de 6.200 inmigrantes irregulares que pretendían entrar en España por Melilla y Ceuta o por la costa, lo que supone un incremento del 63% respecto al mismo periodo de 2013, cuando la cifra fue de unos 3.800.
Este incremento se debe en parte a la presión migratoria que se vivió en el Estrecho en agosto, cuando en dos días alcanzaron las costas algo más de mil inmigrantes, y a los saltos a la valla de nuestra ciudad.
Algunos de estos inmigrantes han sido interceptados en el marco de la operación EPN-Índalo, financiada por la agencia europea de fronteras Frontex y desarrollada entre junio y octubre en las aguas de Algeciras (Cádiz), Málaga, Granada, Almería y Murcia.
Se trata de una de las operaciones que Frontex lleva a cabo en España, Italia y Grecia, con denominaciones distintas en cada uno, para las que destina cerca de 5 millones de euros y en la que colaboran con apoyos de material o de personal otros estados miembros de la UE.
En el caso de Índalo la actuación de vigilancia de las costas para evitar la entrada irregular de inmigrantes, el narcotráfico, el contrabando de tabaco o la contaminación marítima ha tenido importantes resultados, como explicó el teniente coronel Eduardo Lobo, del Centro Nacional de Coordinación para la Vigilancia Marítima de Costas y Fronteras de la Guardia Civil.
De este modo, se han interceptado en las costas en esos meses 4.114 inmigrantes irregulares y 328 embarcaciones, si bien 1.354 lo fueron directamente por las autoridades marroquíes y argelinas, que, gracias a la estrecha colaboración con España, fueron alertadas por los servicios aéreos de la Guardia Civil de la presencia de pateras en aguas de esos dos países y se hicieron cargo de ellas.
Como es habitual, los inmigrantes interceptados en la operación procedían en su mayoría de Mauritania, Senegal, Gambia y Mali, según detalla Lobo, que resalta la menor incidencia cada vez de la presión migratoria sobre Canarias, donde en lo que va de año la Guardia Civil ha interceptado 219 inmigrantes.
Y gracias a las entrevistas que se han hecho a inmigrantes rescatados ha sido posible desmantelar redes dedicadas al tráfico de seres humanos y detener a diez de sus cabecillas.
Pese a que el objetivo principal de Índalo es la lucha contra la inmigración irregular, la operación también ha permitido a la Guardia Civil incautarse de 31 toneladas de hachís y de 33 kilos de cocaína, con un valor en el mercado ilícito de 50 millones de euros, así como detener a 50 personas por narcotráfico.
Asimismo, se ha intervenido a los narcotraficantes 16 embarcaciones, 10 motores, 10 vehículos y una avioneta. Entre las embarcaciones incautadas figura el yate ‘Flying Lady’, cargado con 13 toneladas de hachís, la mayor cantidad de esta droga interceptada en aguas internacionales en la historia de Índalo.
Respecto al contrabando de tabaco, en el periodo de la operación se han practicado cuatro intervenciones con 312.600 cajetillas incautadas en Algeciras y la Línea de la Concepción.
Ha sido el Centro Nacional de Coordinación para la Vigilancia Marítima de Costas y Fronteras de la Guardia Civil desde donde se ha coordinado la operación, con reuniones diarias en las que han participado enlaces de los países colaboradores, así como de Frontex y del Cuerpo Nacional de Policía.