Esta condecoración recuerda la participación de la unidad en diversas batallas entre 1808 y 1814. Este acto castrense ha sido el primero que ha presidido el comandante general, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu.
El acuartelamiento Primo de Rivera acogió ayer la parada militar con motivo de la celebración del patrón del Regimiento de Caballería, Santiago Apóstol. Durante el acto castrense, el primero presidido por el comandante general, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu desde su toma de posesión, éste colocó una corbata conmemorativa en el guión del Regimiento de las batallas en las que participaron durante la Guerra de la Independencia entre los años 1808 y 1814.
Pasadas las 20:00 horas, el general Díaz de Otazu pasó revista a la tropa en formación, dando comienzo así el acto castrense. En el palco presidencial estuvo acompañado del presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, y por el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani. Entre el público civil, se sentaron el diputado popular por Melilla, Antonio Gutiérrez, el presidente de la Audiencia, José Luis Martín Tapia y el juez decano Emilio Lamo de Espinosa, con una nutrida representación del Gobierno local.
Antes de proceder a la colocación de la corbata conmemorativa, las autoridades militares y civiles impusieron las condecoraciones recientemente concedidas. Oficiales, suboficiales y personal de tropa recibieron ayer la placa, la encomienda y la cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, la Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco y la Cruz de Bronce a la Constancia en el servicio.
El patronazgo del Apóstol
El comandante general impuso la corbata conmemorativa de la Guerra de la Independencia en el estandarte de la unidad. Seguidamente tomó la palabra el coronel Barrón, jefe del Regimiento, quien quiso felicitar a los miembros de su unidad condecorados por “su actuación distinguida y que han buscado la excelencia en su quehacer diario”.
El coronel Barrón hizo una reseña histórica sobre el patronazgo de Santiago Apóstol al Regimiento de Caballería, cuya estrecha vinculación data del año 844. “Las crónicas cuentan que el Apóstol se apareció en sueños el rey Ramiro I en La Rioja y le dijo que presentase batalla al invasor bajo su protección y amparo. El rey cumplió lo revelado y en el campo apareció Santiago Apóstol a lomos de un caballo blando al frente de las tropas, luchando al lado del rey y derrotando al enemigo”.
Pero no es hasta el año 1846 cuando se celebra el patrón de Caballería cada 25 de julio. “Este Apóstol destacó por su probada decisión y haber sido entre todos los apóstoles el que más lejos llevó su apostolado y el primero en dar la vida por su ideal. Su ejemplo impregna el espíritu jinete de la Caballería lleno de abnegación, sacrificio, arrojo y acometividad para el desempeño de sus misiones”.
93º aniversario de Annual
El coronel jefe del Regimiento destacó también durante su discurso que éste es el segundo año que el guión de la unidad luce la corbata de la Cruz Laureada de San Fernando que le fue concedida por la gesta heroica de la Caballería Española en los sucesos de Annual en 1921 y que no recibieron de manos del rey Juan Carlos I hasta el pasado 2012.
Además, recientemente el Regimiento ha celebrado el 93º aniversario de los sucesos de Annual en la que los Cazadores del Alcántara, liderados por el teniente coronel Primo de Rivera “afrontaron una lucha desigual con la entereza, la emoción y la gratitud de quien entrega el bien más preciado en socorro de otro”, destacó el coronel Barrón.
Por todo ello, pidió a sus subordinados que “continuéis siendo merecedores del prestigio con que cuenta el Regimiento y que tengáis siempre presente el sacrificio de nuestros antepasados”.
El acto castrense finalizó con el tradicional desfile de la tropa en formación, una escuadra de batidores, la Banda de Música de la Comgemel y dos escuadrones del Regimiento de Caballería, así como de los vehículos de la unidad. Tras el arriado de la bandera española, el comandante general Díaz de Otazu dio por finalizado la parada militar.
La gesta militar en la Guerra de la Independencia
La corbata conmemorativa que recibió ayer el guión del Regimiento Alcántara recuerda la participación de la unidad en la Guerra de la Independencia entre los años 1808 y 1814. El entonces Regimiento de Línea ‘Alcántara’, el 7º de Caballería, participó en multitud de campañas y batallas contra la invasión francesa.
En 1809, en la Cuesta del Madero en Madrid, la unidad de Caballería, tras cargar contra los escuadrones franceses, hizo 200 prisioneros. Nueve días después el mismo Regimiento fue derrotado en Ocaña y tuvo que replegarse a Jaén para reorganizarse.
Tras la Guerra de la Independencia, el Regimiento Alcántara también fue condecorado por su participación destacada en las batallas del Valls, en Aranjuez y en Almonacid.