CpM, PSOE y PPL coinciden en que la decisión de la naviera es fruto de una “mala gestión política”.
La decisión de la naviera Acciona Trasmediterránea de llevarse el barco de alta velocidad al vecino puerto de Beni Enzar no ha sentado nada bien a los grupos de la oposición, que en la jornada de ayer lamentaron que los melillenses no puedan disfrutar de este servicio por primera vez en diez años. La noticia de que este verano no habría barco rápido causó la indignación de los viajeros de la ciudad autónoma, a los que, para más inri, les ha sorprendido ahora que Trasmediterránea se lleve el Alcántara Dos al puerto de enfrente.
Las tres fuerzas políticas de la oposición coinciden en que la decisión de la naviera es fruto de la mala gestión del Ejecutivo local en este terreno. A esto hay que sumar que el contrato de navegación marítima ha quedado dos veces desierto en lo que va de año.
Para el principal grupo de la oposición, CpM, resulta “indignante desayunar leyendo noticias como ésta”. El secretario de Organización del partido, Hassan Mohatar, señaló a El Faro que el Ejecutivo local “está jugando al gato y al ratón con los melillenses”, pues “no están informando sobre las gestiones que están realizando con Marina Mercante”.
“Tomadura de pelo”
“Lo del barco rápido es una tomadura de pelo. El Gobierno local tiene la obligación de velar por el interés de todos los melillenses y el transporte marítimo es algo que nos afecta a todos”, abundó el dirigente cepemista.
Asimismo, calificó de “nefasta” la gestión realizada por el viceconsejero de Turismo, Javier Mateo en este terreno. “El contrato, dos veces desierto y el barco rápido, en Beni Enzar. Se ha cubierto de gloria”, criticó. En cuanto a las declaraciones realizadas por el consejero de Fomento, Miguel Marín, en las que apuntó que la Ciudad no podía tomar medidas al respecto porque la naviera no estaba incumpliendo el pliego de condiciones, Mohatar preguntó por qué el servicio de alta velocidad no se incluyó en el contrato puente que el Ministerio rubricó con la compañía.
“Poco peso político”
Por otro lado, el secretario general del PSOE, Gregorio Escobar, apuntó que el culpable de que el barco rápido no esté en Melilla es el PP. “Ya advertimos de que la incompetencia del Gobierno local interfiriendo en cuestiones de competencia estatal traería serios disgustos a los melillenses”, apuntilló.
Asimismo, subrayó que el Ejecutivo central, que fue el encargado de negociar el contrato puente con Trasmediterránea, “no quiso pagar para que viniera el barco rápido”, por lo que la ciudad ha perdido este verano 800 plazas diarias para viajar a la península.
Para Escobar, se trata de una prueba sobre la “falta de compromiso” del Gobierno central para con Melilla, así como un ejemplo de la “poca fuerza política” del Ejecutivo melillense para defender este tipo de cuestiones en Madrid.
Por otro lado, recordó que si las navieras actúan en el futuro sin contrato público, los viajeros de la ciudad quedarían a merced de las decisiones de estas empresas. “Nos podemos encontrar con que las compañías se llevan a placer sus barcos a Canarias o a Nador”, censuró el socialista.
“Poca sensibilidad”
Por último, el portavoz de PPL, Julio Liarte, manifestó a El Faro que el Gobierno autonómico “se ha quedado tan tranquilo” con la marcha del buque rápido a Beni Enzar. “Antes pedían dos catamaranes para Melilla y ahora dicen que no pueden hacer nada porque Trasmediterránea no incumple el pliego. Menuda pantomima, luego se ponen la medalla por cualquier motivo”, reprochó Liarte. Por último, lamentó que el Ejecutivo “no esté demostrando sensibilidad alguna en estas cuestiones”.