Afirma que la Administración está más ocupada con la “política lingüística de otras regiones” que con Melilla.
El sector de Enseñanza de CSI-F criticó ayer que el Ministerio de Educación haya convocado las oposiciones para Secundaria en Melilla y Ceuta “sin escuchar ni dialogar”. El sindicato asegura además que esta decisión ha sido tomada “porque el Ministerio cree que sabe más de educación que los propios profesionales” que imparten clases. De esta forma, muestra su rechazo a la actitud de la Administración que no ha tenido en cuenta la opinión de los representantes de los maestros.
CSI-F explica en un comunicado que durante seis meses el Ministerio “ha deshojado una margarita, ha dado largas y ha jugado con los opositores y los sindicatos”. También resalta que “después de un perverso juego de escondite o pilla-pilla, ha dicho sí a las oposiciones”. El sindicato critica que la Administración diga una cosa un día y al siguiente sea lo contrario y anima a los responsables del Ministerio a volver a la escuela para que “un verdadero profesional les enseñe”.
CSI-F insiste en que cinco plazas para las oposiciones de Secundaria de Melilla y Ceuta son pocas. El sindicato estaca que el 10% de la tasa de reposición, es decir, de las plazas que se tienen que cubrir no es 5 para las dos ciudades. A lo largo de los dos últimos años se han jubilado o han dejado la Educación unos 70 profesores, por lo que el 10% de la tasa de reposición para las dos ciudades es siete.
También asegura el sindicato que los profesores “piensan que una oferta de empleo pública tan ridícula es más perjudicial que conveniente”.
Por otro lado, CSI-F denuncia que se haya tardado tanto tiempo en decidir la convocatoria de las oposiciones porque eso implica que no se respeta “a la gente que lucha por tener un puesto de trabajo y ganarse la vida”.
El hecho de que el Ministerio anuncie casi en último lugar si hay o no oferta de empleo público cuando sólo tiene a su cargo a Melilla y Ceuta es una actitud que no sólo rechaza sino de la que CSI-F se avergüenza, según afirma en el comunicado.
Interés en otras cosas
“Reconozcamos que Melilla y Ceuta y su educación son dos pequeños picores, algo molestos, pero nada tiene que ver con los grandes dolores de cabeza que tiene el Ministerio, como la política lingüística en ciertas comunidades y si la alternativa a la religión se le pone éste o aquel nombre”, asevera CSI-F.
Aunque el mayor problema, según el sindicato, es que dentro de unos meses se volverá a generar incertidumbre en los interinos y opositores de Primaria, ya que el Ministerio no decidirá con el tiempo suficiente si convoca oposiciones para estos cursos.