Víctor Gamero fue nombrado presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla el viernes 6 de septiembre de 2019. Faltaban tres meses para cerrar ese año en el que el Puerto de nuestra ciudad fue el único que perdió dinero en España. Ahora la situación ha empeorado en Melilla por la pandemia y por el cierre de la frontera con Marruecos. En una entrevista concedida a El Faro, Gamero es contundente: "El Puerto es un test de cómo está la ciudad". El presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla ubica el punto de partida del declive de las cuentas del Puerto de Melilla en mayo de 2017, cuando, en su opinión, comenzó "una caída prolongada y pertinaz del tráfico de mercancías". Esta situación, dice, ha ido a peor hasta terminar en el total cierre de la frontera derivado del covid. De esta forma, el Puerto de Melilla añadió a los problemas que arrastraba tras el cierre de la Aduana comercial en 2018, tener que sobrevivir del tráfico de abastecimiento de una ciudad de 87.000 habitantes. "De 1.160.000 toneladas que había, no sé si llegaremos a 500.000", dijo en referencia al balance anual. A ese recorte "muy importante" del tráfico de mercancías hay que sumar el recorte del tráfico de pasajeros impuesto por la pandemia. Eso le lleva a identificar "dos variables exógenas" de las que dependen la gran parte de los ingresos portuarios: el covid y la frontera. Es lo que él llama "dos pandemias juntas que son como tres, con un efecto devastador". A eso hay que sumar la crisis mundial en el abastecimiento de mercancías. "Teníamos dos líneas de contenedores. No venían todos los días, pero las dos en tiempos de covid cerraron porque para traer tan pocos contenedores no les merecía la pena y toda la carga se ha desplazado a los puertos de Málaga y Almería". explica a El Faro. En ese contexto, el Puerto de Melilla cerró 2020 con más pérdidas que la propia facturación, añade Gamero. Estamos hablando de 5 millones de euros de ingresos y 7 millones de pérdidas, añade. Respecto a qué pasará cuando reabra la frontera con Marruecos, el presidente del Puerto de Melilla no cree que el panorama que se avecina sea un cierre total de tráfico de mercancías. "No será como antes, tan masivo como en los años 2015 y 2016, cuando hubo un incremento muy notable del tráfico de mercancías transfronterizo. Es posible que vuelva a una etapa anterior a aquella. No creo en la desaparición total del tráfico de mercancías", recalcó Gamero. En aquella época, según el presidente del Puerto de Melilla teníamos 40.000 personas cruzando la frontera y "eso es un tráfico de viajeros que lleva mercancías". También asegura Víctor Gamero que hay previsiones que apuntan a la recuperación de la Aduana Comercial. "Están las peticiones. Más que una previsión es el deseo de que eso se cumpla", aclaró. En este punto, Gamero recordó que no existe ningún tipo de base legal para mantener cerrada la Aduana de Beni Enzar. "Ha habido años en los que se hacían 70.000 declaraciones de exportación documentada por esa Aduana comercial. Hay mucha gente que depende de eso y hay que verlo con cierto optimismo", puntualizó. Gamero insiste en que no cree que el tráfico fronterizo vuelva a los volúmenes de los años 2015 y 2016. En esa época se instalaron en Melilla empresarios marroquíes que lideraban ese tráfico de mercancías y esto, según la patronal melillense, habría sido el detonante. El optimismo del presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla viene avalado por el sentido común. "Una ciudad fronteriza, al fin y al cabo siempre tiene la misma solución: tráfico hacia allá y hacia acá. Habrá más o menos control, pero la desaparición total no existe. No creo que pueda existir con una frontera abierta", recalcó. En este sentido, Gamero llama la atención "sobre los estragos" que está haciendo el cierre de la frontera del lado marroquí. "No vemos lo que está pasando en la otra parte, que también necesita de este apoyo económico que presta Melilla a la zona. El tráfico de mercancías en el puerto de Beni Enzar también está bajando".
Incómodos con las limosnas
En la entrevista concedida a El Faro, Gamero también hizo alusión al Fondo de Compensación Interportuario que primero prometió más de 8 millones a Melilla, después lo bajó a cinco y pico; luego lo subió a seis y pico y finalmente volvió a ser lo que se había previsto en un principio: 8,7 millones de euros para compensar las pérdidas en la dársena local. "Las negociaciones y lo que tiene que llevarse cada puerto siempre es un tira y afloja. Nosotros necesitamos cuantos más recursos, mejor. No sólo para cubrir las pérdidas sino para hacer cualquier tipo de inversión. No de ampliación sino de mantenimiento del puerto. No nos sirve que tengamos cubierta la nómina y los gastos corrientes. Queremos algo de oxígeno. En ese sentido, intentamos defender el puerto lo mejor posible". Pese a que la situación de Melilla y Ceuta es muy similar, Gamero defiende que un puerto como el de Ceuta no es comparable con el de Melilla. "Ceuta y Melilla no son iguales: sus puertos, tampoco". En depresiones económicas como la actual, Melilla pierde mucho dinero y Ceuta pierde muchos ingresos. Detrás de esto está la respuesta a la pregunta de El Faro de por qué el Puerto ceutí se lleva 12,3 millones del Fondo de Compensación Interportuario y el de Melilla 8,7 millones. Al respecto Gamero destaca que hace tres años el Fondo de Compensación al Puerto de Melilla estaba en 1.600.000 euros, el último en 4,5 millones y el que se ha cerrado para 2022 en 8,7 millones. "Es una subida francamente exponencial", puntualizó. De esos 8,7 millones, hay 7 millones para cubrir pérdidas y 1,7 millones que, según explicó el presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla, irá asignado a un Plan de Empresas al que van todas las inversiones que pretende realizar el puerto. Ese Plan de Empresa hay que negociarlo. "Metemos alguna obra y lo que podemos. Tenemos que ganar dinero". El dinero del Fondo de Compensación se le daba hace unos años a los puertos para que hicieran inversiones y en estos momentos es para sufragar pérdidas. Gamero reconoce que "es una situación muy penosa". "Estamos muy incómodos de tener que estar a expensas de las limosnas del sistema portuario", comentó.
"Dependemos de lo que quiera Marruecos"
A la pregunta de qué puede hacer el Puerto de Melilla para pasar de recibir dinero para tapar agujeros a ser rentable, Víctor Gamero responde comparando la situación de Melilla respecto a la de Ceuta. "Lo primero que hay que tener en cuenta es la ubicación. Nosotros no somos Ceuta. Ellos están en un estrecho con más tráfico mundial. Cerca de 100.000 barcos pasan cada año. A poco que alguno pare... Aquí ese tráfico está muy lejano. Tenemos que vivir de lo que podamos generar y de nuestra influencia en la zona de Marruecos. Y aquí tenemos una variable exógena: dependemos de lo que quiera Marruecos". Gamero está convencido de que se puede ver luz al final del túnel si el Puerto de Melilla encuentra una fórmula de autosuficiencia económica. Y eso, en su opinión, no es una cuestión del Puerto sino de la Ciudad. Al respecto él tiene claro que hay que buscar nuevos mercados. "La ciudad tiene que hacer uso de instrumentos que se le concedan para poder tener mercancías y otro tipo de negocios". El modelo económico en el que Gamero cree que tiene que centrarse el futuro de Melilla debe tener un factor diferencial para conseguir que la actividad se desplace a la ciudad.