Después del repunte de las rebajas de julio, agosto está siendo un mes muy flojo para los comerciantes de la ciudad, según afirmó a El Faro el presidente del colectivo que representa a este sector, Enrique Alcoba. El impulso consumista que propició la bajada generalizada de precios y la predisposición de los melillenses a aprovecharse de las mejores ofertas de la temporada ha dado paso a un panorama tranquilo y sin apenas actividad en el sector. De hecho, muchos de los negocios de la zona centro, han aprovechado para echar el cierre por vacaciones hasta que pase lo que resta de verano.
Alcoba señaló que agosto ha sido siempre un mes malo para las ventas en los comercios locales. No se espera que la actividad se recupere hasta después de las fiestas patronales, que concluyen a mediados de septiembre. Hay varias causas para explicar este descenso en las compras. La principal es la más obvia: Cientos de melillenses hacen las maletas a comienzos de agosto para marcharse unos días de vacaciones a la península.
Como resaltó el presidente de la Asociación de Comerciantes (Acome), en verano el centro de la ciudad autónoma parece “un pueblo fantasma”.
Sin apoyo
Las peculiaridades económicas y sociales de Melilla también propician que las ventas sean menores. El elevado número de empleados públicos que hay en la ciudad sirve de sostén a los negocios locales. Siendo agosto un mes prácticamente inhábil para la administración pública, a causa de que los funcionarios se toman unos días de descanso, lo normal es que la mayor parte de las tiendas se encuentren vacías.
También cuenta el hecho de que nos encontremos a final de temporada. Ya son pocos los que a estas alturas del verano se rascan el bolsillo para comprarse un nuevo bañador, pues ya queda menos de un mes para que comience el otoño. Así pues, los consumidores prefieren esperar a que lleguen nuevos productos a los escaparates y, si tienen que gastar, comprar algo para la temporada de entretiempo.
A la baja
Lo normal es que las ventas desciendan. Sin embargo, queda la duda. ¿La bajada de este año es la misma que en ejercicios anteriores o más pronunciada? La respuesta de Alcoba es que agosto es cada vez más flojo para las compras. En comparación al anterior verano, han decrecido en un 20%. A esto hay que añadir la tendencia descendente que sufre el sector desde el año 2009, cuando la crisis comenzó a hacerse notar más en la ciudad.
“Ahora mismo, Melilla está vacía completamente. Basta con echar un vistazo a las calles del centro para comprobarlo”, apuntó Alcoba en referencia al éxodo vacacional propio de estas fechas. Asimismo, admitió que a los melillenses les cuesta cada vez más darse un capricho y eso se nota en los comercios a final de mes. “La cosa va a peor. Llevamos así varios años y, de momento, no vemos la luz al final del túnel. Estamos con el agua al cuello y tiramos hacia delante como podemos”, añadió.
La Universidad de Granada dio a conocer en una conferencia celebrada en el Club Marítimo…
Los presupuestos de Fomento para 2025 contempla la rehabilitación de la Asociación de Vecinos Constitución.…
Sibila Teatro vuelve a las tablas del Teatro Kursaal-Fernando Arrabal con una nueva obra que…
En el apartado de obras públicas, el consejero Miguel Marín adelantó, durante la presentación de…
Estamos en una semana de presentación de los presupuestos de las distintas áreas para el…
Ante las nuevas críticas de los ecologistas, el consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Daniel…