Una protesta de un centenar de sirios obliga a cerrar Beni Enzar

Unos 100 sirios se plantaron en ‘tierra de nadie’ al grito ‘Libertad’, según fuentes policiales. Otro grupo fue interceptado  en las garitas marroquíes de control de pasaportes. La Policía marroquí habría llevado a mediodía a mujeres y niños a la Comisaría de Nador.

Al menos un centenar de ciudadanos sirios se acercó anoche pasadas las 20:30 horas a la verja del paso de Beni Enzar con la intención de entrar en Melilla, pero las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas cerraron la frontera a cal y canto durante casi dos horas, según informaron a El Faro testigos presenciales de los hechos.
Desde la Delegación del Gobierno aseguran que la Policía Nacional cerró anoche la frontera tras un aviso de las autoridades marroquíes de que había “un grupo numeroso e incontrolado de personas que se dirigían hacia Beni Enzar”. Marruecos no especificó si eran o no inmigrantes sirios. Ninguna de estas “personas incontroladas” llegó a ‘tierra de nadie’, según la información de que disponía anoche la Delegación.
Fuentes policiales aseguran que pasadas las 20:30 horas de anoche, al menos un centenar de sirios ya había conseguido concentrarse en ‘tierra de nadie’ al grito de ‘Madrid’ y ‘Libertad’.  Aclaran que se trató de una concentración pacífica y que en ningún momento los inmigrantes intentaron abalanzarse sobre el paso fronterizo porque de haberlo hecho, lo habrían conseguido. Los sirios que llegaron anoche al territorio neutral superaban en número a los efectivos policiales que vigilaban a esa hora el puesto de Beni Enzar.
Poco después, pasadas las nueve de la noche, otro grupo similar intentó dirigirse a la ‘tierra de nadie’, pero fue interceptado por las fuerzas de seguridad marroquíes a la altura de las garitas de control de pasaportes del país vecino. Según testigos en Nador, los sirios quedaron “acorralados por las autoridades marroquíes”.

Llevados a Comisaría
Todo empezó al mediodía de ayer, cuando varias mujeres y niños sirios se acercaron hasta el territorio neutral que separa Melilla de Marruecos con la intención de entrar en España. Fuentes marroquíes aseguran a este diario que estas personas fueron trasladadas de malas maneras a la Comisaría de Nador, donde no habrían recibido un trato correcto por parte de un supuesto oficial de la Policía  llamado ‘Osman’.
Todos los sirios salieron de la Comisaría de Nador en torno a las cuatro de la tarde (hora marroquí) y volvieron a concentrarse sobre las ocho y media de la noche en ‘tierra de nadie’.
La frontera de Melilla permaneció cerrada hasta las 22:20 horas de anoche, cuando, según la Delegación del Gobierno, un grupo de GRS marroquíes despejó la zona.
Este punto lo confirman fuentes de Nador consultadas por El Faro que aseguraron sobre las nueve y media de la noche que los policías de la frontera de Marruecos estaban preparando un operativo para despejar el territorio neutral.
Hay que añadir que las fuerzas marroquíes también cerraron ayer su frontera para impedir el paso de sirios a Melilla y que, a diferencia de su forma de actuar ante otro tipo de concentraciones en ‘tierra de nadie’, ayer el país vecino colaboró con España.
Este comportamiento ha recibido críticas en Nador porque consideran que Marruecos está dando la espalda a los refugiados sirios.

Efecto llamada
El Faro ya publicó hace una semana que la dirección del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) tenía información de que cerca de un millar de sirios había llegado en los últimos días a la provincia de Nador con la intención de entrar en Melilla.
Las autoridades marroquíes aseguraron al otro día que en Marruecos hay unos 2.000 inmigrantes sirios, de los cuales sólo 913 han solicitado la protección internacional de asilo.
El director del CETI, Carlos Montero, está convencido de que el traslado a la península de 217 inmigrantes sirios que acamparon en la Plaza de España sirvió de efecto llamada para el resto de refugiados que tiene la intención de entrar en Europa.
De hecho, Montero explicaba que hasta hace unos meses los ciudadanos sirios que han huido de la guerra preferían acercarse antes a Ceuta que a Melilla. Sin embargo, sólo en el mes de enero entraron en la ciudad cerca de un centenar de ellos, atraídos por la traslados de sus compatriotas a Málaga.

La llegada de inmigrantes sube un 50% en Melilla y Ceuta, según Interior

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, acudió ayer al Congreso para explicar la actuación de la Guardia Civil en la avalancha de inmigrantes de la semana pasada en Ceuta que provocó la muerte de 15 subsaharianos. Fernández Díaz abrió su intervención alertando de la “creciente presión” migratoria procedente de África que sufren las dos ciudades autónomas. También, del acoso al que las someten las mafias.
Para ejemplificarlo, el ministro apuntó que la llegada de inmigrantes a Melilla y Ceuta creció un 48,5% en 2013. “Esto obedece a que ambas ciudades son objetivo prioritario de las organizaciones criminales que trafican con personas”, dijo.
Por su parte, el Gobierno marroquí aseguró ayer que en 2013 hubo 41 intentos de asalto a las vallas de Melilla y Ceuta, frente a los 30 intentos de 2011.
El ministro enumeró ayer las medidas tomadas para evitar la entrada de inmigrantes. En el caso de Melilla, Fernández Díaz destacó las obras de rehabilitación de las instalaciones del perímetro fronterizo en la zona del Cortado de Aguadú.
También apuntó que en el Centro Operativo de Servicios de Melilla se han actualizado los sistemas de cámaras y viodeograbadores del perímetro fronterizo, que cuenta con 42 cámaras para exterior, tres cámaras térmicas, fribra óptica, soportes y un nuevo software.
Además, avanzó que para prevenir los asaltos a la valla de Melilla, “que en los últimos meses se han intensificado”, el Ministerio ha tomado medidas de refuerzo estructural y en este punto dio por hecho que ya se ha llevado a cabo la remodelación del paso  de Beni Enzar. Hay que recordar que estas obras ya han sido adjudicadas, pero los trabajos no han empezado aún.
La parte más polémica de su intervención fue cuando explicó la diferencia entre las ‘devoluciones en caliente’ y los ‘conceptos operativos’ entre los que se incluyen que el mar no tiene vallado ni señalización que delimiten un país de otro; que cualquier intervención sobre los inmigrantes en un punto que podría considerarse como “el principio del territorio español” puede poner en riesgo sus vidas y que si se espera a que entren en España para devolverlos es para evitar que sus vidas corran peligro.