Una gestión de residuos más sostenible y la semielaboración de inorgánicos

El responsable de Equo Melilla, Manuel Soria, propone una planta biomecánica para los orgánicos en sustitución de la incineradora, que crearía más puestos de trabajo.

Tal y como ha expresado en varias ocasiones el responsable de Equo Melilla, Manuel Soria, la eliminación de la planta incineradora de la ciudad tiene una clara alternativa “más sostenible, más económica y que multiplicará por diez o por doce los puestos de trabajo”, afirmó a ‘El Faro’. Para Soria, la gestión de residuos de la ciudad no es sostenible y por ello propone una serie de medidas que ya se han empezado a aplicar en otras regiones, como es la recogida de residuos ‘puerta a puerta’. Cataluña y el País Vasco ya han puesto en marcha esta iniciativa, según afirmó Soria.
Además, el responsable de esta formación ecologista explicó que una alternativa a una planta de compostaje clásico, que ocupa mucho espacio físico, es la planta de biomecanización. En ella se tratan los residuos orgánicos con los que se produce no solamente compost sino también energía eléctrica y “no requiere tanto espacio”, apostilló.
Con los residuos inorgánicos, Soria propuso una separación manual–mecánica del papel y cartón, vidrio, plásticos y otras basuras. Además, gracias a esta separación se podrían tratar específicamente cada tipo de residuo e incluso semielaborarlo en Melilla y comercializarlo en Marruecos. Algo que Soria aseguró “es viable y más económico”.
Los productos semielaborados que se comercializarían sería el calcín de vidrio y la parta de papel, ejemplificó. Para Soria, este tratamiento semielaborado, además de crear más puestos de trabajo de los que existen actualmente en la incineradora, “daría un valor añadido” a los residuos y su tratamiento. Todo ello, dijo, conformaría un sistema de gestión y tratamiento integrado de residuos “mucho más sostenible que el actual”, concluyó.

Soria: “Hay que naturalizar el río”

El responsable de Equo Melilla, Manuel Soria, que expresó su rechazo al proyecto de cubrimiento del río de Oro, afirmó a este diario que la tendencia en estos momentos es “la naturalización de los cauces y no al contrario, como pretende la Ciudad Autónoma con su política del hormigón”. En este sentido, Soria afirmó que el Ejecutivo melillense utiliza la técnica de “dejar que una zona se deteriore para tener un argumento para actuar”.
Para Soria, la problemática del encharcamiento que se produce en la desembocadura del río tiene “fácil solución”, pues, según explicó, únicamente es necesaria una arqueta y una conducción del agua a la Estación de Bombeo del río.
En cuanto al cubrimiento del río, Soria afirmó que únicamente se trata, para el Gobierno local, de una “cuestión estética” y resaltó que, precisamente, en esta zona “no hay necesidad de una zona peatonal puesto que ya está el Paseo Marítimo y la explanada de San Lorenzo”. Por ello, consideró “poco práctico ponerle un techo al río”, razonó.