La situación en la que trabajan los policías nacionales en los pasos fronterizos de Melilla no es la más idónea. Así lo creen la Unión Federal de Policía (UFP), que denunció ayer que hay goteras dentro de las oficinas que este cuerpo tiene en Beni Enzar, y el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que subrayó que el ruido de las obras en Farhana es insoportable. Ambos lamentan que sus compañeros de profesión tengan que realizar su labor de protección de los ciudadanos en esas condiciones.
UFP señaló a El Faro que de nada ha servido la inversión económica que hizo el Estado en Beni Enzar. Indicó que llueve dentro de las instalaciones que tienen los agentes en este paso fronterizo.
El sindicato subrayó que hay cubos (de varias dimensiones como se ve en la fotografía) que recogen el agua que cae del techo.
“Llueve a mares”
En este sentido, puntualizó que cuando se realizó la rehabilitación de estas instalaciones nadie hizo una reforma de las oficinas y ahora los policías sortean los recipientes donde caen las gotas del agua. Es más, resaltó que, en ocasiones, “llueve a mares” dentro de estas oficinas policiales.
UFP destacó que la imagen que se da a los ciudadanos que entran en las dependencias es “muy mala y terrorífica”.
“Somos máquinas”
Por otro lado, SUP mostró su indignación por el fuerte ruido que están aguantando los policías que realizan su trabajo en Farhana. Aseveró que ni a la Delegación del Gobierno ni a la Jefatura Superior de Policía les importa este asunto porque sus representantes trabajan en oficinas y no están en este paso fronterizo.
Amianto y ruido
“Somos máquinas rodeados de máquinas. Llevan desde verano respirando el polvo de la obra, el amianto y soportando el ruido”, añadió el sindicato. De hecho, criticó que no se haya dado a estos agentes ni gafas ni los auriculares para protegerse. En cambio, los obreros que se encuentran trabajando en el lugar sí que tienen estos equipos para evitar daños físicos.
“La situación es lamentable”, aseveró el SUP, que apuntó que ni la Jefatura ni la Delegación del Gobierno toman una decisión sobre este paso fronterizo, a pesar de que hace una semana se destacó que se iba a cerrar para finalizar el proyecto. Concluyó que les da igual la situación en la que trabajen los policías.
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