Tres inmigrantes lograron al mediodía de ayer acceder a Melilla saltando la valla por una zona próxima al paso fronterizo de Mariguari. Uno de ellos fue detenido por la Guardia Civil por resistencia e intento de agresión a un agente de la Policía Local en las inmediaciones, según confirmaron fuentes de la Delegación del Gobierno.
El salto se produjo sobre las 13:15 horas y uno de los inmigrantes subsaharianos fue detenido poco después en la rotonda que está ubicada frente al paso fronterizo.
No hubo lesiones
Fuentes de la Consejería de Seguridad Ciudadana indicaron que, al parecer, el arrestado se puso “nervioso” y se enfrentó a un policía. No obstante, no se produjeron lesiones durante el altercado.
Sin embargo, sí se registraron daños materiales en la luna de un coche patrulla del Grupo Canino (Grucan) de la Policía Local, provocados por uno de los garfios de hierro que utilizan los inmigrantes para ayudarse para trepar por el vallado.
El subsahariano intentó huir corriendo en dirección hacia el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) junto a sus compañeros pero los agentes lograron interceptarlo.
Amenazas
Fuentes de la Guardia Civil señalaron que está previsto que el detenido pase hoy a disposición judicial por “amenazas y resistencia grave” a un agente de la Policía Local.
Fuentes de la Delegación del Gobierno concretaron que el Cuerpo Nacional de Policía se hará cargo de los inmigrantes para seguir el protocolo habitual y aplicar la Ley de Extranjería. Mientras tanto, estas personas estarán en el CETI.
El último salto a la valla de Melilla se produjo el pasado 8 de agosto, cuando cinco inmigrantes de origen subsahariano intentaron acceder a nuestra ciudad de forma irregular por la zona de los Pinares de Rostrogordo, consiguiéndolo dos de ellos. Este hecho se registró también a plena luz del día.
Unos días, antes, el 31 de julio, cuatro inmigrantes, de un grupo de cuatrocientos que había intentado acceder a Melilla por la valla por el paso fronterizo de Beni Enzar, lograron acceder a nuestra ciudad.
Uno de ellos fue detenido por agredir a dos guardias civiles con mordeduras y arañazos que causaron heridas leves.
Además, a mediados de julio, cuatro inmigrantes consiguieron saltar la valla. En mayo, se produjo el asalto más numeroso, logrando acceder 110 personas.
También en febrero se registró otro salto al vallado en Melilla, cuando 18 inmigrantes entraron en territorio español.
4.000 intentos en 2016
Durante el año 2016, la frontera entre España y Marruecos en Melilla, que abarca unos once kilómetros y medio y tiene una altura de seis metros, registró durante el pasado año unos 4.000 intentos de entrada irregular a través de la valla, de los que solo un 7% lo lograron.
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