TRAGSA empezó a trabajar en la continuación de la ejecución de las obras del Hospital de Melilla en noviembre de 2018 a través del encargo recibido por el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), tras la paralización de las obras y la posterior resolución del contrato con la anterior empresa constructora.
Las obras comprenden la construcción de un Hospital con una superficie construida total de 45.044,65 m² a la que hay que añadir 11.600 m², que corresponde a la planta -1 donde se ubican aparcamientos cubiertos para 315 plazas, vestuario del personal, archivos, mortuorio y zona de reserva. El edificio construido ocupará el 33,80% de la superficie total del solar (42.645 m²) e incluirá el equipamiento e instalaciones necesarias para su puesta en servicio.
El hospital contará con una disponibilidad de 279 camas en funcionamiento del Hospital, que puede ser ampliable hasta 362, dada la versatilidad del diseño para disponer de algunas habitaciones individuales convertibles a dobles, en el caso de que fuera necesario habilitar más recursos sanitarios en la ciudad.
El Área Materno Infantil, constituida por los recursos de Obstetricia, Neonatología y Pediatría, contará con 32 camas de la Unidad de Obstetricia (43% de las habitaciones serán individuales) y 16 del Servicio de Pediatría (10 en hospitalización que estarán en habitaciones individuales, permitiendo la modalidad de hospitalización madre-hijo o padre-hijo y 6 de preescolares).
El Bloque Obstétrico se adapta a la Estrategia de Atención al Parto Normal (EAPN) en del Sistema Nacional de Salud (SNS) que impulsa un profundo cambio en el modelo de atención al parto tradicional y promueve las Unidades de Trabajo de Parto y Recuperación para la asistencia a la parturienta en todos los periodos del proceso de parto vaginal y al recién nacido sano que no necesite ingreso.
El Bloque Quirúrgico contará con 6 quirófanos (uno de ellos obstétrico) y una Unidad específica para Cirugía Mayor Ambulatoria de 10 puestos. La unidad de Reanimación Quirúrgica tendrá también 10 camas y dará respuesta a los requerimientos de los quirófanos y del bloque obstétrico, con los que estará directamente relacionada.
La Unidad de Cuidados Intensivos estará dotada de 12 camas, parte de las cuales se dedicarán a pacientes coronarios, duplicando así las 6 que actualmente existen en la ciudad. Contará con tres hospitales de día: uno quirúrgico, otro oncohematológico y de procedimientos médicos y un tercero, psiquiátrico, integrado en la estructura de Psiquiatría, otra área muy desarrollada en el nuevo hospital.
Dentro de la actividad ambulatoria es donde se encuadra el Área de Consultas Externas que, con sus 43 locales, viene a casi triplicar el actual dispositivo. Contará también con un Gabinete de Exploraciones y Pruebas, estructura de nueva creación, que contará con 8 gabinetes y sus zonas de apoyo, que prestará servicios tanto a los pacientes ingresados como a los ambulatorios.
Una vez que se empezaron a planificar las obras para reanudar la construcción del Hospital, la filosofía de TRAGSA siempre ha sido ejecutar la mayor cantidad de obra posible con medios propios, y dentro de ese planteamiento, se ha realizado un gran esfuerzo para dotar a la actuación con personal contratado en la propia Ciudad Autónoma.
Previa a la declaración del estado de alarma se llegaron a alcanzar picos de 120-130 trabajadores, de los cuales el 65 % son empleados propios de TRAGSA. De todos los trabajadores propios, más del 80 % son residentes de la Ciudad Autónoma distribuidos en las siguientes categorías: administrativos, encargados de obra, técnicos y personal de obra.
La gran cantidad de personal propio contratado para esta obra, ha permitido que a pesar de las circunstancias excepcionales derivadas del COVID-19, se haya podido mantener la actividad de la obra, minimizando el impacto sobre la ejecución que se hubiera podido producir de no disponer de trabajadores melillenses.
Además, dentro de la propia actuación hay muchas empresas locales que realizan trabajos y/o prestan servicios auxiliares que son necesarios para la correcta ejecución, como colaboración en montaje y desmontaje de andamios, gestión de residuos, seguridad y vigilancia, movimiento de tierras, transporte de materiales, medios auxiliares, etc. Por otro lado, empresas que se están incorporando para realizar trabajos más especializados también están contratando parte de su personal dentro de la Ciudad.
Para TRAGSA la formación de sus trabajadores es una de sus prioridades. Por lo que se han impartido cursos reglados en Prevención de Riesgos Laborales para más 15 trabajadores de la obra que carecían de ella, y se ha formado a 8 trabajadores destacándolos como Recursos Preventivos para la propia actuación.
Por otro lado, se han formado operadores de Grúas Torre, así como de uso de maquinaria de obra civil, y que a día de hoy se encuentran plenamente integrados en la utilización de toda la maquinaria autopropulsada perteneciente al parque de maquinaria propio de TRAGSA.
Ahora mismo se está gestionando la contratación de nuevo personal para desarrollar las labores de ejecución de la tabiquería seca, que sirvan de refuerzo al personal existente, al mismo tiempo que se está formando a varios operarios que están finalizando los trabajos para los que se contrataron.
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