A un mes de la fecha prevista para la apertura al tráfico de la Gran Vía, ya comienzan a verse los avances de esta obra. Algún propietario de los establecimientos que llevaban meses sin poder instalar las terrazas de sus locales, ya han iniciado a colocar el mobiliario en las zonas más avanzadas. Después de meses de incertidumbre, este progreso ha significado un aliento para los empresarios de la zona, que esperan que los trabajos sigan evolucionando rápido, para volver a la normalidad lo antes posible. Este incremento de la plantilla de trabajadores, así como la visibilidad en el avance de los trabajos, hace pensar a los propietarios de los negocios que la obra se logre entregar en la fecha prevista y poder aprovechar una temporada de buenas ventas como es la de Navidad. Aún así, saben que será una apertura parcial y que aún quedará trabajo por hacer que no se podrá concluir antes del 15 de diciembre, sobre todo en uno de los márgenes, donde aún queda por adentrarse más en el interior de los soportales para la rehabilitación de los accesos. Después de meses soportando unos trabajos que han mermado los ingresos en sus negocios, los empresarios de la Gran Vía ven un halo de luz con los avances de la obra, esperando que mantengan este ritmo para culminar, cuanto antes, este proyecto de remodelación.