El River Melilla tendrá que esperar al menos una jornada más para estrenar su casillero de puntos al encajar una nueva derrota, en esta oportunidad ante el Real Jaén C.F., en partido correspondiente a la segunda jornada que no pudo disputarse en su momento por la imposibilidad de desplazarse el equipo andaluz debito a la falta de pasajes.
El partido disputado en la tarde de ayer en el Campo Federativo de La Espiguera resultó entretenido a pesar de que hubo poco fútbol de elaboración, aunque sí mucha pelea y entrega por parte de ambos conjuntos. El River aguantó bien plantado ante uno de los rivales más cualificados del campeonato, confeccionado para dar el salto de categoría, pero el mayor potencial y la calidad del cuadro aceitunero acabó imponiéndose en el tramo final del choque.
La primera mitad resultó entretenida entre dos equipos que saltaron al sintético de La Espiguera con las ideas muy claras. El Real Jaén con la intención de encarrilar pronto el encuentro y el River con el objetivo de contener el potencial jienense y aprovechar algún contraataque o acción a balón parado.
La escuadra andaluza llevó la iniciativa desde el pitido inicial y apenas se había cumplido el minuto de juego cuando Juanka estuvo a punto de adelantar a su equipo tras un pase medido de Víctor Armero, pero el disparo del exterior jienense se marchó fuera por muy poco.
Pasado el primer cuarto de hora el equipo dirigido por Fernando Aznar fue sacudiéndose el dominio andaluz y acercándose con cierta frecuencia a las proximidades del área jienense, aunque sin verdadero peligro. Así, Chivi cabeceó un centro desde el flanco izquierdo de Bilal, pero la pelota se marchó por encima del travesaño.
Al filo de la media hora Antonio López remataba muy cerca del palo un centro desde la derecha de Víctor Armero; y casi a renglón seguido el lateral Choco se plantaba ante el meta local David, pero el arquero melillense evitaba el gol y el posterior rechace lo lograba despejar la zaga rojinegra.
La pelea sin tregua en la zona ancha hacía que el interés no decayera. El Real Jaén quería, pero no podía ante el orden y la entrega de los ribereños, que al final pudieron irse al descanso con ventaja en una magnífica acción en la que Yosef habilitaba con un pase medido a las espaldas de los centrales, que Chivi, totalmente solo ante el guardameta del equipo lagarto Ángel, cabeceaba muy cerca del larguero, por lo que al asueto se llegaba con empate en el luminoso.
Tras el paso por los vestuarios el guión apenas varió. El Jaén seguía llevando la iniciativa en el juego ante un River muy bien plantado que contragolpeaba con peligro.
Así, a los cinco minutos de la reanudación, el jugador visitante Heras enganchaba un zapatazo desde fuera del área al que David respondía con una gran intervención lanzándose junto a la cepa del palo derecho. La réplica no tardaría en llegar por mediación de Bilal, que finalizaba un contraataque plantándose ante el meta Ángel, que se empleaba a fondo para evitar un gol cantado, desviando el cuero a saque de esquina.
El juego seguía desenvolviéndose en la parcela ancha, aunque ninguno de los equipos renunciaba a acercarse a las áreas. Los blanquillos con un juego más asociativo y los rojinegros con uno más directo.
Pasado el ecuador del segundo acto, Víctor Armero pudo adelantar al equipo lagarto, pero su disparo se estrelló en la base del palo derecho del portal defendido por David. Y casi a renglón seguido llegaba la jugada polémica del encuentro en una acción muy protestada por los locales en la que el rojinegro Chivi caía dentro del área andaluza sin que el árbitro señalara el punto fatídico.
El tramo final del partido resultó decisivo para el devenir del mismo. El Jaén, consciente de que un punto ante el farolillo rojo del Grupo IX era poca renta, daba un paso adelante en busca de la victoria. Así, a falta de diez minutos para el final, una jugada bien trenzada del equipo jienense en la que Choco se plantó solo ante David tras una pared con Víctor Armero acabó con la pelota en el fondo de la red tras un disparo cruzado del lateral andaluz ante el que nada pudo hacer el meta del conjunto local.
El gol dejaba tocado al equipo local, que tan solo dos minutos después encajaba el 0-2 definitivo tras un centro chut de Víctor Armero que se colaba en la portería rojinegra tras golpear la pelota en el jugador del River Melilla C.F., Rachid.