Somos Melilla llegó a la Asamblea con un único diputado, Amín Azmani, en mayo de 2023, después de apenas un año de vida en la ciudad, si bien venía precedido de la experiencia de Adelante Melilla y un presidente que se había formado políticamente en el PSOE local, partido en el que militó durante largo tiempo. El Faro le ha entrevistado para conocer su balance de 2023 y asuntos de la actualidad, como los presupuestos de 2024.
-Hágame balance del 2023 de su partido, desde que se creó hasta ahora, y los tres objetivos que se marcaron.
Somos Melilla, con tan solo un año de vida, ha logrado representación en la Asamblea. Ha sido nuestro objetivo principal, fundamental para poder trabajar con más fuerza por el bien de la ciudadanía. Somos el único partido político que hizo una campaña electoral limpia, transparente y dedicada 100% a explicar a los melillenses nuestras ideas y propuestas para mejorar la ciudad. Los demás partidos estaban centrados en la campaña del voto por correo y el cruce de acusaciones. A pesar de tener enfrente a formaciones que manejan una gran maquinaria electoral y mucho poder económico, hemos conseguido abrir un hilo de esperanza para el cambio en Melilla: 1.524 melillenses han confiado en nosotros y no los vamos a defraudar. 2023 ha sido un año muy intenso: hemos crecido en afiliados y en mi caso, como diputado, le tengo que reconocer que no he parado desde el primer día que entré en la Asamblea. Junto a mi equipo, estoy visitando barrios y calles de nuestra ciudad, haciendo propuestas y denunciando públicamente muchos asuntos que preocupan a los melillenses. Además, internamente vamos cumpliendo más objetivos, como la celebración de nuestro primer Congreso y nuestra primera Asamblea, donde hemos rendido cuentas a los afiliados y estamos mejorando la participación en Somos Melilla. Seguimos creciendo y sumando.
-¿Por qué cree usted que no se concedieron más días para estudiar el Presupuesto de la Ciudad?
-Porque el PP no ha cambiado nada. Nos mintieron. Cuatro años en la oposición no les ha hecho reflexionar, ni ser más humildes ni empáticos. Son los primeros presupuestos de esta legislatura. Estamos hablando de más de 364 millones de euros y hemos tenido tan solo un fin de semana para poder analizarlos, algo totalmente imposible si se quieren hacer las cosas bien. Todos los parlamentos y autonomías dedican un tiempo mínimo de 10 días para estudiar los presupuestos antes de comenzar el debate. El Gobierno local ha presentado los presupuestos con 3 meses de retraso y fuera de plazo. Ceuta ya los debatió en noviembre y aprobó en diciembre.
-Los presupuestos dicen que son continuistas y usted critica que no se han podido hacer enmiendas, algo, para usted, básico en democracia.
-El 72% de las partidas presupuestarias son idénticas a las del Gobierno anterior. Hay continuidad. Y el resto son parches que no van a resolver los graves problemas de Melilla. No nos han dejado hacer ninguna enmienda ni propuesta para mejorarlos. Confunden mayoría absoluta con absolutismo, prepotencia y soberbia. Así no se construye una ciudad entre todos. Estos presupuestos están hechos a imagen y semejanza del PP, no a imagen y semejanza de Melilla y de lo que necesitamos los melillenses. Nos esperan cuatro años de un Gobierno que no quiere contar con nadie, sólo con los suyos. Por eso la primera decisión que han tomado ha sido decretar el nombramiento de 52 cargos entre miembros del Ejecutivo, asesores, secretarios, etc, que nos van a costar 10 millones de euros en esta legislatura.
-El señor Imbroda tiene una forma de ver la democracia que usted no comparte. A su parecer confundió el Pleno con un mitin dirigido a sus compañeros de partido.
-Claro. Es que, en lugar de hablar de una Melilla unida, fuerte y ambiciosa para modernizarse y progresar, el señor Imbroda se ha dedicado a dar un mitin en el salón de plenos. Se piensa que seguimos en campaña electoral. No puede buscar la unidad vetando a los demás. Así no se construye nada. Mire Ceuta. Tiene un presidente que siempre cuenta con todos los partidos políticos y la sociedad civil, tenga o no mayoría absoluta. Aquí no, aquí van de sobrados y se olvidan que, para construir una Melilla de todos, un presidente debe unir a todos o, al menos, intentarlo con todas sus fuerzas. No paran de emigrar melillenses. No paran de cerrar comercios y empresas. Somos la ciudad con más paro juvenil de España y de las primeras en Europa. Las calles están hechas un asco. Para reconducir esta situación no sobra nadie, pero el PP piensa que con sus 15.000 votos están legitimados para excluir y no contar con los 40.000 melillenses restantes. El señor Imbroda está cometiendo el mismo error que le hizo perder el poder en 2019.
-Usted dice que Imbroda siempre tiene la última palabra para no dar oportunidad a la réplica
-Así es. No ha cambiado. Es difícil hacer cambiar a alguien que lleva en el Ayuntamiento desde 1979. Hace uso del último turno de palabra en los Plenos de la Asamblea para que no podamos contradecir ninguna de sus palabras. Yo soy partidario de que intervenga de los primeros para hacer un debate sano, democrático y participativo. No hay que tener miedo al debate. Pero se niega.
-El gobierno monocolor “no está para perder tiempo", según dice Imbroda y ustedes tienen que hacer su trabajo. Tarea complicada.
-Le hemos pedido presentar propuestas y mejoras a los presupuestos. Su respuesta ha sido que no está para perder el tiempo. Este es el concepto de democracia que tiene el Gobierno: reducir la democracia a su mínima expresión. Le gusta aquello de ‘todo o casi todo para el pueblo, pero sin el pueblo’. Le guste o no, Somos Melilla seguirá alzando la voz ante cualquier abuso de poder o injusticia. Haremos propuestas, a pesar de que en el Gobierno del señor Imbroda estén empeñados en ignorarlas. Iremos a cada calle y cada barrio de esta ciudad a explicar que tenemos un Gobierno que solo quiere rescatar a los suyos y no rescatar a Melilla. A pesar de este desprecio, en Somos Melilla no hemos venido a hacer política de trincheras: apoyaremos las cosas que veamos que son buenas para Melilla y rechazaremos con contundencia las que veamos que dañan a la ciudadanía y su futuro. De hecho, hemos votado a favor de medidas positivas para la ciudad y hemos presentado varias mociones para resolver problemas reales de la calle.
-¿Cree que Melilla con Imbroda no está dando su mejor versión?
-Uno llega al poder para servir a la gente y no para servir a los suyos. El señor Imbroda confunde al PP con toda Melilla. Hay que recordar que mucha gente votó en estas elecciones por rencor al Gobierno de Coalición por Melilla y PSOE. Esto, sumado a la baja participación y a la manipulación del voto por correo que está en manos de la Justicia, ha beneficiado a un PP que se ha disparado a los 14 escaños y la mayoría absoluta. Cuando se vota con las vísceras y el enfado, no se vota en conciencia y se olvida que el PP ya gobernó la Ciudad Autónoma durante 20 años, dándonos la peor versión de Melilla. Lo peor de todo es que el PP no ha cambiado. Están volviendo a las andadas y en tan solo seis meses se han olvidado de lo que han prometido. Aquí estamos Somos Melilla para recordarles día a día que su cometido es rescatar a Melilla y a los melillenses, no a los suyos.
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