El Congreso de los Diputados ha elegido presidente del Gobierno al candidato socialista, Pedro Sánchez.
En la segunda y definitiva votación no ha habido sorpresas y la investidura ha salido adelante con una mayoría simple muy ajustada: 167 votos a favor, 165 en contra, y 18 abstenciones.
Han votado a favor del candidato socialista los diputados del PSOE, Unidas Podemos, PNV, Más País, Compromís, NC, Teruel Existe y BNG, y en contra el PP, Vox, Cs, JxCat, UPN, CUP, PRC, Foro y CC, mientras que ERC y EH Bildu se han abstenido.
El candidato ya investido para ser presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido aclamado por los diputados de su grupo y los 35 de Unidas Podemos nada más conocer el resultado de la votación.
"Muy contento; gracias, de verdad", han sido las palabras que Sánchez ha pronunciado en los pasillos del Congreso tras abandonar el hemiciclo.
El líder del PP, Pablo Casado, ha sido el primero en acercarse al candidato para felicitarle, pero ha sido un frío saludo, tan solo un apretón de manos, en tanto que el futuro vicepresidente, Pablo Iglesias, no ha podido disimular las lágrimas.
Tras proclamar el resultado de la votación la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, varias emociones han ocupado los escaños.
Sánchez se ha puesto en pie para recibir el aplauso de los demás 119 diputados socialistas, así como el de los 35 de Unidas Podemos, todos ellos también en pie. Estas dos formaciones compondrán el inminente nuevo Gobierno de coalición.
Pablo Casado ha sido el primero en felicitar a Sánchez, para lo que ha tenido que superar la nube de fotógrafos creada alrededor del ya candidato investido. Ha sido un apretón de manos muy frío.
Tras él, le ha saludo el portavoz del PNV, Aitor Esteban, y la de Cs, Inés Arrimadas, así como la presidenta del Congreso, Meritxell Batet.
Pocos minutos después, Sánchez e Iglesias se han fundido en un abrazo y se han estrechado la mano, posando ante los informadores gráficos.
El líder de Unidas Podemos ha cogido un ramo de flores para entregárselo a la diputada catalana Aina Vidal, quien ha acudido al Congreso a votar a pesar del cáncer que le impidió hacerlo el pasado domingo, en la primera votación. Ella, entre lágrimas, ha dado las gracias mientras sus compañeros de bancada coreaban "sí se puede".
Sánchez también ha departido con ella unos instantes, tras haber recibido las felicitaciones, uno a uno, de los parlamentarios de su grupo, todos los diputados y algunos senadores.
Otro de los que ha llorado ha sido Iglesias; no ha podido ocultarlo en el abrazo que se ha dado con su responsable de Acción de Gobierno, Pablo Echenique.
Antes de abandonar el hemiciclo, Sánchez ha posado para los fotógrafos e incluso se ha hecho una foto con ellos.