La Delegada del Gobierno, Sabrina Moh, ha explicado que, “en materia de regularización, seguiremos siendo escrupulosos en la aplicación de la legalidad vigente, tal y como se ha hecho hasta ahora”.
La máxima representante del Gobierno en nuestra ciudad, en declaraciones a El Faro, ha explicado que la Ley de Extranjería y su Reglamento de Desarrollo, así como la normativa europea, establecen los procedimientos que existen para que las personas que se encuentran en situación irregular en nuestro país, desde distintos supuestos, puedan optar a la residencia legal.
“Los cauces legales son los que son y la actuación de la Delegación del Gobierno es dar cumplimiento a la Ley”, ha dejado claro, al tiempo que ha señalado que la normativa establece que se debe estudiar caso por caso, algo que no se puede hacer de oficio, sino que debe ser a instancia del interesado.
Moh ha explicado que se van a estudiar todos los casos que se presenten en la Delegación del Gobierno, como se ha hecho hasta hora. De hecho, es la Oficina de Extranjería la que estudia expediente por expediente y notifica la correspondiente resolución al interesado con la aprobación o denegación dependiendo del cumplimiento de los requisitos recogidos en la ley.
La CIM calcula que hay unas 2.000 personas que pueden regularizar sus situación
Este lunes, El Faro publicaba una entrevista al presidente de la Comisión Islámica de Melilla ,Hasan Laaboudi, en la que explicaba que la entidad había logrado el compromiso de que la delegación del Gobierno estudiase los casos de personas residentes en Melilla que no tienen regularizada su situación.
La CIM ha realizado un censo en la ciudad y, según sus datos, habría unos 2.000 residentes en Melilla sin documentación que podrían solicitarla. La CIM se refería a personas con arraigo en la ciudad que la menos lleven tres años residiendo en la ciudad.
La CIM y la Delegación de Gobierno mantuvieron la semana pasada una reunión durante la que el equipo de la Delegación explico a los miembros de la entidad que cada expediente debía analizarse de forma individual, "caso por caso".