“Robles es lo peor que le ha podido pasar al Ingesa de Melilla”

Critica el “deterioro” de la sanidad en la ciudad y asguraa que la calidad es “peor” que en otras comunidades l El socialista propone ampliar el centro de salud de Cabrerizas

El diputado del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso adscrito a la Oficina Parlamentaria de Melilla y portavoz de la Sanidad de los socialistas en esta institución, José Martínez Olmos, asevera que la solución a los problemas sanitarios de la ciudad es reiniciar las obras del Hospital Universitario cuanto antes. Apunta a El Faro que en un año y medio podría estar termina esta construcción , si se retomaran los trabajos.
–Asegura que la situación de la sanidad en Melilla es “insostenible”, pero ya utilizó este mismo término en 2011.
–Pero insostenible no desde el punto de vista económico, sino de la visión del ciudadano. Estoy viendo el deterioro de la calidad de una manera dramática. Hablemos de temas concretos, como las colas en el centro de salud de Cabrerizas. Vi una situación esperpéntica. La gente haciendo cola en la calle para entrar corriendo para hacer otra cola. Y mientras, peleándose porque no hay orden ni posibilidad de hacer las cosas bien. Eso es un tema que no es asistencial, es un mal trato a la gente. Luego si analizas las condiciones de los sanitarios, ves que les falta material, que no tienen buenos contratos y todo esto afecta a la calidad asistencia. Esto no está pasando en el resto de la península.
–¿El PSOE no tiene ninguna responsabilidad de la paralización de la obra del Hospital Universitario?
–El PSOE ha sido el partido que prometió el hospital, empezó la obra y lo dejó, cuando perdimos las elecciones, en construcción. Ésa es la realidad.
–El Ingesa se defiende asegurando que el PSOE no adjudicó el dinero para ese modificado.
–Se firmó el modificado. Los modificados son elementos que surgen en casi todas las obras públicas. Es el PP el que no está de acuerdo con eso y hacen con ese desacuerdo la paralización de la obra. Pero la gestión del PSOE fue comprometer el hospital, sacar el concurso, empezar las obras y dejar las obras en marcha cuando nos fuimos. De hecho, en diciembre nos marchamos del Gobierno y las obras continuaron unos meses ya con el PP en el Ejecutivo. Es el PP el que paralizó las obras. Tres años después, a punto de terminar la legislatura e incumpliendo todos los plazos que a sí mismo se dio el Ingesa, seguimos con las obras paralizadas. Es su responsabilidad.
–¿Cómo valora la gestión del actual director territorial del Ingesa, Francisco Robles?
–Claramente la gestión de Robles ha quedado desacreditada se mire por donde se mire. Es lo peor que le ha podido pasar al Ingesa en Melilla, no sabe gestionar. Es una persona incapaz de gestionar, responder o estar a nivel público representando a una institución tan importante como el Ingesa. Pero bueno, el PP sabrá por qué lo mantiene en el cargo. A las pruebas nos remitimos. Cuando digo que la situación es insostenible en la sanidad de Melilla, nos referimos a que el Gobierno es incapaz de tener a gestores responsables, no hace falta ser de izquierda ni derechas, sino ser un buen gestor.
–¿Qué haría usted mejor que Robles?
–Nosotros, ya en su momento, durante el Gobierno del PSOE fuimos los que más inversiones hicimos comparativamente con otros. Lo que vamos a plantear ahora es un plan estratégico para Melilla porque estamos preocupados de que la calidad asistencial en la ciudad sea peor que en otras regiones españolas. Por lo tanto, vamos a reforzar la Atención Primaria, con una ampliación del centro de salud de Cabrerizas. También vamos a plantear la dotación del actual hospital para que no se deteriore más la asistencia, mientras que se construye en el nuevo hospital, con nuevos equipos y con personal. Y es prioritario la reanudación de las obras del Hospital Universitario porque es una cuestión de voluntad política.  
–¿Qué le parece la reforma de Urgencias y de la cocina del Comarcal y del centro de salud de Polavieja?
–Es insuficiente porque así lo reconocen los propios profesionales. Se está acabando la legislatura y esas obras no están. La legislatura en sanitaria en Melilla es en blanco, es negativa.
–Ha criticado las contrataciones a enfermeras y auxiliares por parte del Ingesa. Afirma que son contratos fraccionados. ¿Qué puede hacer sobre este tema? El Ingesa afirma que es legal este tipo de contratos.
–No es una cuestión de que sea legal. También es legal hacerlo de otra manera. Si una persona sustituye a otra durante quince días, debe estar contratado durante todo ese periodo. Es inadmisible que se dividan los contratos para evitar pagar los descansos a los sanitarios.  
–Insisto, ¿cómo lo solucionaría?
–Contratando bien a la gente. Sustituyendo a un trabajador por otro.
–¿No puede denunciar estos casos, si tan graves le parece?
–Nuestra misión es la denuncia política. También sirve la de los sindicatos. No se puede permitir que la ley deje maltratar al trabajador. Siempre se ha sustituido a una persona por otra durante un periodo. Ahora, por ahorrarse algo de dinero se maltrata al trabajador. La única vía es denuncia política. La de los tribunales, si los sindicato lo creen conveniente. Estoy convencido de que el ministro de Sanidad no es conocedor de este tema. Éstas no son maneras de gestionar el personal. Es gente que se siente maltratada por sus administradores. 
–Son muchos los colectivos que reclaman un aumento de plantilla, celadores, enfermeros, médicos...
–Hay que ampliar la plantilla en relación al nuevo hospital. La cuantía depende del personal que necesite el Hospital Universitario y lo que puede absorber el Comarcal en este momento.
–Pero el problema se vive ahora en el Comarcal. Los profesionales afirman que no se puede esperar a que se haga el nuevo hospital.
–Por eso, podemos diseñar ese hospital de futuro y ya se puede asumir parte de esa plantilla. No toda cabe en el actual centro hospitalario. Pero Imbroda no tiene peso político para reivindicar a Madrid esta mejora. No es competencia del Gobierno local, pero las puede pedir este incremento de sanitarios que necesita ahora Melilla.
–¿Qué opina sobre la reforma de la cocina? ¿Qué cree que va a pasar con esos trabajadores?
–El tema de la cocina huele muy mal. Nos preocupa la iniciativa.
–¿En qué sentido?
–En este tema hay dos opciones, se hace el servicio de cocina con medios propios o se contrata a una empresa externa. Habría que replantearse si merece la pena que el Comarcal tenga su propio servicio de cocina poniendo sobre la mesa las condiciones laborales de los empleados y el coste de esta área.  Pero nos preocupa, sobre todo, el incremento el elevado coste de la adjudicación de los menús a una empresa privada mientras que la cocina del Comarcal está cerrada. A mí no me salen los números. Me resulta muy alto el coste de un menú. También nos preguntamos qué va a pasar con los trabajadores.
–¿Cómo haría la reforma de Urgencias?
–Aquí la solución es el nuevo hospital. Si se reinician las obras ahora, podría estar en año y medio.
–Ya, pero ¿mientras que se resuelve este tema?
–Han tenido tiempo de hacer la reforma. ¿Qué han hecho hasta ahora?Que hagan esta reforma cuanto antes, pero el problema se resuelve con el nuevo hospital. Esto es un parche y servirá durante un tiempo. Cuanto más tarde la construcción, más necesidades habrá y más parches deberán hacer. ¿Por qué esta reforma no la hicieron durante estos tres años? No estoy de acuerdo con la gestión porque no resuelve nada.
–Han preguntado en varias ocasiones sobre el uso privado del Comarcal.
–Si hubiese sucedido en otro lugar de España, el consejero hubiese dimitido. Lo que hay es una práctica inadecuada de la gestión de lo público y un intento de ocultar. Terminaremos sabiendo qué ha sucedido y por ello, seguiremos preguntando.  
–En la respuesta que les da el Gobierno central explica que es habitual que médicos de fuera se trasladen a Melilla para hacer una intervención si el paciente ha sufrido un accidente.
–No digo que el procedimiento no sea habitual, pero tengo dudas que lo haya hecho de la forma habitual. Hablamos de un familiar de un cargo público (la madre del consejero de Economía y Hacienda, Daniel Conesa) y hay que dar todas las explicaciones para tener la certeza de que no ha habido privilegio. Es fácil demostrar si no ha habido privilegio. Si das la información sobre el tema a  cuenta gotas, da la sensación de que no es así.
–¿Qué espera del Ingesa en estos meses?
–Espero poco desgraciadamente. Pero quiero hacer posible que el ministro conozca la realidad de Melilla por si quiere hacer algo e intervenir. Le voy a dar ese beneficio de la duda. Voy a trasladarle los problemas de la ciudad, a ver si interviene.