Los chicos pasaron siete horas escondidos en la zona de amarre de cabos que está en la parte exterior del buque l Los tres eran marroquíes y tras darles atención sanitaria fueron llevados a dependencias policiales
La Policía Nacional rescató ayer a tres jóvenes marroquíes de 18, 19 y 23 años en el puerto de Málaga tras viajar ocultos durante más siete horas en la zona exterior de un buque procedente de Melilla. Los inmigrantes fueron localizados en el casco de la embarcación tras completar el viaje en unas condiciones climatológicas adversas, según informó ayer la Policía en un comunicado. Los tres jóvenes subieron clandestinamente a la embarcación en el puerto de nuestra ciudad y se escondieron en una zona para amarrar cabos de refuerzo situada en el exterior del buque hasta su llegada a Málaga, donde fueron localizados por los agentes. Tras recibir la asistencia sanitaria, los jóvenes fueron trasladados a dependencias policiales. Medidas en el puerto La entrada de polizones en el puerto de nuestra ciudad es un problema al que desde la Autoridad Portuaria están tratando de poner solución mejorando las medidas de control. El año pasado más de 19.000 personas trataron de colarse en la zona de seguridad de estas instalaciones. No hay datos de cuántos logran su objetivo de entrar en los barcos y llegar a la península, ya que solo se contabiliza a aquellos que son detectados antes de meterse en los buques. Los responsables del Puerto están instalando nuevas vallas y concertinas en diferentes puntos con la intención de que resulte más complicado el acceso a esta zona restringida. Las medidas han despertado mucha polémica, ya que gran parte de los polizones son menores de edad y la colocación de las concertinas puede suponer un riesgo para su integridad física. No obstante, desde el Gobierno han insistido en que se trata de un sistema legal y no agresivo, es decir, que si no tratan de pasar por un espacio prohibido, no habrá ningún problema. Trabajo policial Al mismo tiempo, se ha intensificado el trabajo policial para recoger a jóvenes que viven en la calle. En los casos de menores, son llevados a los centros de acogida dependientes de la Administración, mientras que a los adultos se les expulsa a Marruecos previa apertura de un expediente, tal y como marca la Ley de Extranjería. En el último mes y medio han sido localizados 312 jóvenes que estaban viviendo a la intemperie, de los que 157 eran menores de edad y el resto, adultos. Los últimos datos facilitados por la Delegación del Gobierno apuntaban que en los dos últimos operativos desarrollados se había logrado ‘recoger’ a un total de nueve menores de edad y 26 adultos, todos ellos de nacionalidad marroquí. Cabe señalar que desde la Administración han insistido en numerosas ocasiones en que gran parte de los jóvenes que deambulan por la calle no son menores, sino adultos y que muchos de los que tratan de colarse en los barcos también son mayores de edad. El rescate en Málaga demuestra que efectivamente hay una parte de estos chicos que son adultos. Desde la Ciudad entienden que no es bueno que pequeños y mayores estén juntos.