Categorías: Cultura y Tradiciones

“Querer conocer al terrorista que te hirió es tener un coraje bien profundo”

  • El Teatro Kursaal acoge mañana viernes y el sábado ‘Tierra del fuego’, en la que la actriz interpreta a una exazafata israelí que sufrió un atentado

Melilla está muy unida en estos momentos a Alicia Borrachero (Madrid, 1968). La actriz se subirá mañana viernes y el sábado (a las 21:00 y 20:30 horas, respectivamente) al escenario del Teatro Kursaal Fernando Arrabal con la obra ‘Tierra del fuego’, basada en hechos reales y dirigida por Claudio Tolcachir. Además, se la puede ver en televisión, donde da vida a la Duquesa de la Victoria en la serie ‘Tiempos de guerra’, que está ambientada en nuestra ciudad.

–¿Qué va a ofrecer ‘Tierra del fuego’ a los melillenses?

–Cuenta la historia de una exazafata israelí que sufrió un atentado. Habla de su recorrido personal desde los 22 años hasta los 46, cuando decide escribirle al terrorista, que está en una cárcel en Londres. Él le pide que vaya a visitarle. Víctima y verdugo se encuentran. Todos los diálogos son las conversaciones que realmente se mantuvieron. Luego sí hay una parte de ficción. Pero nadie se pone de parte de nadie y en ningún momento se justifica la violencia. Somos seis personajes en escena y es una obra teatralmente muy interesante.

–¿Es necesario escuchar la historia del otro, del enemigo, para curarse uno mismo?

– Yo no diría tanto. Entiendo lo que quiere decir pero yo no diría tanto. La obra es más humilde. No pretende generalizar tanto. Cuenta la necesidad que tuvo esta mujer de poder mirar la cara al autor del atentado. Cada uno puede sacar sus conclusiones. Pero sí es un ejercicio de escucha.

–Cuenta una historia muy dura. ¿El público sale muy desanimado?

–Me quedo con la reacción de los espectadores. Comenzamos en enero de 2016 con esta obra. Después de Melilla, iremos a París, que ha sufrido tanto por el terrorismo. Cada espectador tiene una experiencia. Pero no es desmoralizadora. Es todo lo contrario. No mete el dedo en la llaga. No se centra en el atentado en sí. De lo que verdaderamente se trata es de dos personas que se están intentando comunicar, ni siquiera entender. La mayoría de la gente nos comenta: “Pues yo estaba más de un lado que de otro antes de entrar y ahora, al salir, se me ha abierto un poco la cabeza”. De ambos lados. Hemos tenido además entre el público víctimas de terrorismo, personas que han cometido atentados, familiares de víctimas de diferentes tipo de terorrismo... Y nos ha pasado lo mismo con todos. Habla del conflicto israelí-palestino; yo aprendí mucho sobre ello. Pero es una obra muy esperanzadora. La gente no sale desanimada sino todo lo contrario.

–¿Qué le está enseñando el personaje?

–Es una mujer valiente pero no por ser una persona dura ni nada por el estilo. Es valiente porque sigue un impulso que ni ella sabe por qué lo hace. No puede hablar de ello con lógica. Todo el mundo a su alrededor le pregunta: “¿Por qué? ¿Qué necesidad tienes de ir a ver a ese hombre después de tantos años, con todo el año que te hizo y lo que le hizo a tu amiga, que la mató?”. Pues a pesar de eso y sin poder explicar por qué, porque no es “voy a perdonarlo”, ni mucho menos, dice que no sabe por qué va pero que necesita hacerlo. Es alguien valiente porque sin entenderlo ella y con toda la oposición de la familia, de la sociedad y de una parte de ella misma, aún así va. Y durante la obra va descubriendo por qué. Querer conocer al terrorista que te hirió es un tipo de coraje bien profundo y bien hondo. Es lo que más me ha enseñado el personaje; no porque yo lo tenga sino porque ahora ya sé que existe gente así. Hay mucha gente que está haciendo este tipo de cosas, pero no solo por actos terroristas. Hay gente que está necesitando verle la cara al otro y no es para escupirle en la cara ni para recriminarlo. Es porque hay algo que necesitan comprender. Y es muy sanador, para la gente que lo necesita hacer, claro. Hay gente que no lo necesita y que quizás para ellos es mejor no mirar atrás.

–También actúa en la serie televisiva ‘Tiempos de guerra’. ¿Cómo es el personaje de la Duquesa de la Victoria?

–Fue una mujer adelantada a su tiempo, emprendedora, con una capacidad de trabajo infinita y, sobre todo, una mujer entregada en cuerpo y alma a su vocación, que era llevar el alivio a los soldados españoles, aliviar el dolor ajeno. Siendo una gran enfermera, sobre todo fue una gran gestora de hospitales. Tuvo una gran entrega a los demás.

–También es un personaje muy fuerte, muy valiente.

–Todos los personajes enseñan algo siempre. Esta mujer tiene una gran fuerza de espíritu. El coraje que tiene está relacionado con seguir adelante y buscar en contra de todo algo que no sabe lo que es. Esa es su valentía. Es alguien de armas tomar pero su fuerza imparable tiene más que ver con una necesidad de aliviar el dolor ajeno.

–¿Qué ofrece esta serie al panorama televisivo?

–Es el público quien debe decirlo. Pero yo puedo decir que ‘Tiempos de guerra’ nació con la vocación de contar la historia de unas mujeres de alta sociedad, lideradas por la Duquesa de la Victoria. Viniendo de todas las comodidades de la sociedad de aquel entonces, tienen que ir a una guerra terrible, muy cruenta, aunque todas lo son. Cuenta cómo cambia la vida de estas mujeres al enfrentarse con el dolor, con la muerte, con lo inesperado. Y algunas se encuentran consigo mismas ahí también. Y la serie también presenta una época de nuestra historia que es muy interesante.

–La serie está ambientada en Melilla aunque no ha sido rodada aquí. ¿Ha visitado antes la ciudad?

–Es la primera vez. He estado en Ceuta pero no en Melilla. Pero voy sin ninguna idea fija. Tengo muchas ganas de ir. Quiero sorprenderme; quiero llegar y descubrirla. Tengo mucha curiosidad por conocer la ciudad, por pisar el terreno donde estuvo la Duquesa de la Victoria y por compartir esta función con el público de Melilla.

-Usted es muy reconocida por su papel en ‘Periodistas’. Gracias a esta serie o por culpa de ella, muchos jóvenes quisieron estudiar esta carrera...

–[Risas] Nos lo han dicho mucho. No sé si la serie popularizó un poco la profesión. Tampoco sé si eso es necesariamente bueno... El periodismo es una profesión tan difícil que guiarse por una serie que es ficción y no presenta la realidad al 100%... Pero a nosotros nos alegró mucho porque era un medidor de que la audiencia estaba interesada en la temática que estábamos presentando. No sé cuánto de verdad habrá en ello.

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