Quedan inauguradas las obras de sombreado del Parque Forestal

El Parque Forestal de Melilla, uno de los espacios naturales más queridos por los ciudadanos, luce hoy una imagen renovada y, sobre todo, más segura y cómoda para los visitantes. El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, ha inaugurado en la mañana de este miércoles las obras de sombreado y renovación de los parques infantiles situados en su interior. Estas actuaciones buscan facilitar el uso de las zonas de juego durante todo el año, especialmente en los meses más calurosos, haciendo del parque un espacio aún más accesible y agradable.

Imbroda, acompañado por varios miembros de su equipo de gobierno, ha destacado la importancia de este proyecto para la ciudad. "Estamos ante uno de los pulmones de Melilla, uno de los espacios naturales más importantes de la ciudad. Este parque es un símbolo de nuestra apuesta por la calidad de vida y el medio ambiente", afirmó en su intervención. El presidente recordó que la creación de estos parques no estuvo exenta de polémica en su momento: “Cuando nosotros decidimos hacer aquí dos grandes parques, votaron en contra. Sin embargo, seguimos adelante porque sabíamos que era una necesidad para todos los melillenses".

La obra recién finalizada ha consistido en la instalación de grandes velas tensadas que proporcionan sombra en las tres principales zonas de juegos infantiles, cubriendo en total alrededor de 600 metros cuadrados. Estas estructuras de sombreo permitirán que las familias puedan disfrutar del parque también en las horas de mayor insolación, protegiendo a los niños de los efectos perjudiciales de la exposición directa al sol.

Una intervención pensada para la seguridad de los más pequeños

Además del sombreado, la actuación ha incluido la renovación completa del pavimento de las áreas de juego. Se ha instalado un suelo especial de caucho, adaptado a las normativas de seguridad vigentes, con un grosor específico que amortigua posibles caídas, minimizando el riesgo de lesiones. “Queríamos que los niños pudieran jugar con total seguridad. Este tipo de suelo es obligatorio y, además, nos contaban los técnicos que tiene propiedades anti-bacterianas, lo que añade un plus de higiene al espacio”, explicó Imbroda.

El presidente bromeó durante su intervención comentando que, aunque el material ayuda a mantener la limpieza, “si se cae un chupachups al suelo, mejor limpiarlo antes de volver a comerlo”, arrancando sonrisas entre los medios de comunicación.

En total, se han instalado unos 600 metros cuadrados de este nuevo pavimento, cumpliendo así los más altos estándares de seguridad y calidad. El conjunto de las actuaciones —las velas de sombra y el pavimento amortiguador— supone una importante mejora para las miles de familias que cada semana visitan el Parque Forestal.

Una inversión que mira al futuro

El coste total de las obras ha ascendido a 398.000 euros, una inversión que Imbroda considera más que justificada. “Con esta actuación damos un gran servicio a tantos padres, a tantos niños que utilizan este parque masivamente. Es una inversión en bienestar, en calidad de vida, y en seguridad”, recalcó.

El presidente aprovechó la ocasión para anunciar nuevas actuaciones que reforzarán aún más la oferta de ocio y recreo del parque. Entre ellas, destacó la inminente adjudicación de un nuevo parque infantil inclusivo, pensado para que todos los niños, independientemente de sus capacidades, puedan disfrutar de un espacio adaptado. Asimismo, se renovará la popular tirolina existente en el parque, garantizando que cumpla todos los requisitos actuales de seguridad.

“Estamos trabajando para que esta zona esté fabulosa, completamente preparada para que los niños disfruten y las familias tengan un lugar de encuentro, incluso en los días de más calor”, añadió.

Con las mejoras realizadas, el Parque Forestal de Melilla se consolida como uno de los espacios públicos más destacados de la ciudad, un verdadero pulmón verde que ofrece naturaleza, ocio y bienestar para todas las edades. La inauguración de hoy supone un nuevo capítulo en la apuesta del Gobierno de la Ciudad Autónoma por el cuidado de los espacios urbanos y la mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos.