Pymes Melilla apuesta por nuevos nichos de mercado para reactivar la economía local

La situación económica de la ciudad autónoma es bien conocida y las empresas locales son las que más sufren este revés. Para la presidenta de Pymes Melilla, Francis Serón, apostar por nuevos nichos de mercado que consiga retener a los melillenses en la ciudad y atraer turismo es fundamental, además de conseguir abaratar el precio de los transportes (la gran tarea pendiente) para pasajeros y mercancías con el fin de atraer turismo. 

Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran cómo Melilla ha sufrido una regresión en la creación de empresas durante el 2023, mientras que en gran parte del país ocurre lo contrario. Una senda que viene ya desde hace varios años y que refleja la situación económica y empresarial que atraviesa la ciudad. 

Para Pymes Melilla la incertidumbre es el principal factor por el que emprendedores y empresarios tienden a no invertir en una nueva empresa o a no estudiar nuevos proyectos. Recuerda Serón que el cambio del 50% de la bonificación a la Seguridad Social será un problema a la larga. 

¿Por qué? Porque una empresa cuenta durante el año con diferentes gastos y, con este panorama, son muchos los que no se atreven a invertir porque no saben qué situación va a generar en el futuro y si será beneficiosa. “La incertidumbre frena la economía y al empresario”, añade Francis Serón. 

Y, del mismo modo que alguien no se atreve a emprender, una empresa que no está pasando por un buen momento tenderá a cerrar por este mismo motivo. 

Por otro lado, la presidenta de Pymes Melilla señala que los nuevos emprendedores se encuentran con muchas trabas administrativas por culpa de la burocracia. Ante la que proponen una “ventanilla única” para el proceso que requiere crear una nueva empresa.

Estas trabas hacen que, al final, los empresarios piensen más de dos veces abrir un nuevo negocio en Melilla, incluso a aquellos que ya tienen empresas y quieran ampliar su nicho de mercado. 

2024 acaba de empezar y queda todo el año por delante para revertir la situación, por lo que Serón se muestra optimista con el futuro de la ciudad y aboga por trabajar entre todos para crecer. “Tiene que ir bien, tenemos que mejorar y entre todos arrimar el hombro para empezar nuevos planes estratégicos de la ciudad. Tenemos que sentarnos a trabajar para que la cosa vaya creciendo y la economía comience a moverse”. 

En esta línea de trabajo, avanza que Pymes Melilla se reunirá con Promesa con el objetivo de conseguir ayudas para los nuevos emprendedores y para el empresario que quiera cambiar de actividad. 

Sobre esto, la empresaria señala que hay nuevos nichos de mercado que son viables en la ciudad y que pondrán sobre la mesa en el encuentro con el fin de ampliar las ideas de negocios que pueden mejorar la economía local. 

Nuevos nichos de mercado

Al igual que el Gobierno local, Francis Serón opina que es hora de mirar hacia otro lado y dejar de depender de la aduana comercial y la frontera dada la situación que la ciudad arrastra desde hace años. “No podemos contar con ella. Si viene, bienvenida sea. Pero hay que buscar otro tipo de proyectos y mirar en otras direcciones”. 

Una de las iniciativas de la Ciudad Autónoma es impulsar el desarrollo tecnológico en Melilla, además del turismo y la Universidad, para reactivar la economía. Coincide la presidenta de Pymes Melilla en este camino, pero considera que, además del sector tecnológico, también debe haber cabida para otros tipos de proyectos. 

El turismo y el ocio son grandes pilares para la economía, recuerda. “Si queremos que haya universitarios y que haya turismo, tenemos que abrir nuevos tipos de negocios para que las personas jóvenes se queden en Melilla y no se vayan fuera. Si hay actividades y ocio en la ciudad, al final uno tiende a quedarse porque encuentra algo en lo que invertir su tiempo libre”, explica. 

Realmente lo que ocurre en Melilla es la pescadilla que se muerde la cola. Muchas personas se van porque no encuentran ocio ni actividades en las que invertir su tiempo y la ciudad se queda vacía. Esto provoca que los empresarios, al no tener rentabilidad, no se atrevan con nuevas propuestas. Al final, es una dinámica que necesita romperse ya para que la economía salga a flote. 

La apuesta principal es hacer a Melilla una ciudad atractiva. Opina Francis Serón que si se instalan nuevas empresas tecnológicas con trabajadores de fuera, también necesitarán el ocio y el transporte barato para que se queden. “Hay que trabajar muchos nichos y proyectos para que haya un cambio de ciudad”, apunta. 

Arreglar el transporte

A nadie le pasa por alto que una de las grandes dificultades que tiene Melilla para conseguir atraer el turismo es el precio del transporte. Algo que la presidenta de Pymes Melilla ha vuelto a poner de relieve. Y es que, no solo hay que abaratar el coste para los pasajeros, sino también para la mercancía. 

Desde la entidad reivindican la importancia de que se abarate el transporte de mercancías y la posibilidad de que Melilla se adhiera a la misma normativa (“que no es nueva”) que tienen las Islas Canarias y las Islas Baleares. 

También apuestan por el coste cero o un coste muy barato para las mercancías y se rebaje el IPSI. “Nosotros tenemos que tirar de un barco y de aviones. En la península hay carreteras, autovía y trenes. Tenemos que hacer ver en Madrid que en Melilla nuestra carretera y nuestra vida al final es el transporte marítimo, por lo que debe ser muy barato”. 

“Al final, si en Melilla la mercancía sale barata, el consumo también lo será y tenderás a quedarte: puedes comprar. Puede venir un turismo, que haya productos más baratos y se los lleven para la península”, señala. 

Esta es una de las ideas que se pusieron sobre la mesa en la reunión con el Observatorio Económico de Melilla, además de otros proyectos en los que, asegura, hay que trabajar a corto plazo. 

“Si haces una Melilla en la que el consumo es barato y el transporte es barato, la gente querrá venir”, insiste Serón, quien resalta la importancia de que las empresas estén sentadas en las mesas, aportando ideas y proyectos para conseguir ese cambio que Melilla necesita. 

Sumando todas estas pequeñas cosas y el coste a la baja, se conseguirá también “otro potencial de ciudad”, concluye Francis Serón.