La líder socialista y diputada por el PSOE local, Gloria Rojas, comenzó este viernes su intervención en el Debate por el estado de la Ciudad asegurando que era “difícil” poder encontrar un espacio de participación con el Gobierno local. Pero se congratuló de que “en 115 días dejen de gobernar”. Indicó que la política del PP en estos años ha sido siempre la misma, a excepción de tres cuestiones que han surgido tras julio de 2018, cuando llegó Pedro Sánchez al Ejecutivo central. Estas cuestiones son: exigen más cosas al Gobierno central, elevan el tono con Marruecos e insultan a través de las redes sociales.
Rojas aseguró que el PP ha descubierto el verbo “exigir” y lo usa con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Subrayó que la diputada del PP por Melilla, María del Carmen Dueñas, presentó entre el 2015 y el 2018 un total de nueve peticiones en el Congreso. En cambio, de junio a enero son 17 las solicitudes. Se preguntó si los problemas de Melilla comenzaron hace siete meses.
También cuestionó la socialista por qué el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, ha subido el tono sobre las actuaciones con Marruecos, cuando hace unos años aseguraba que el país vecino debía de serenarse en sus declaraciones sobre determinadas políticas y que había que buscar que las relaciones fueran excelentes. En cambio, ahora con el cierre de la aduana comercial habla de “desplantes y deslealtad”.
La socialista dijo que ella también está preocupada por el cierre de la aduana comercial, pero remarcó que se está trabajando en este tema desde el Gobierno de Pedro Sánchez.
En cuanto a las formas de miembros del Gobierno local a la hora de manifestarse en las redes sociales, Rojas indicó que se avergüenza como ciudadana de algunos de los comentarios, como los que hace el viceconsejero de Control y Gestión de Servicios, Francisco Villena; pero remarcó que “quien se lleva la palma es Miguel Marín, elegido por el Ejecutivo para estar en la Autoridad Portuaria”.
La diputada socialista explicó que Marín muestra su “deslealtad a Puertos del Estado” y deberían cesarle por ello. Aunque Imbroda rebatió ese comentario asegurando que a quién se debe el presidente del Puerto es a Melilla.
Para Imbroda, esto fue “una moralina” sobre el uso de Twitter y aseveró que los populares por dar la cara se meten en líos.
Otro asunto que criticó Rojas fue que los presupuestos se hacen con un “corta y pega” de años anteriores y preguntó a la Ciudad si es que se pasa consejería por consejería preguntando qué ponen en esas partidas o si quieren añadir algo más.
En relación a las mociones que ha presentado el PSOE local, Rojas destacó que han sido 40 en estos cuatro años y sólo una se ha debatido. Se preguntó qué pasará con una que han expuesto sobre un estudio para ver la adición de jóvenes a apuestas online.
La socialista aseguró que no tiene nada claro, tras cuatro años en la Asamblea, cuál es el modelo económico para Melilla del PP. Le preguntó si se centra en la ampliación del puerto y, aunque insistió en que el proyecto está recogido en los Presupuestos Generales del Estado, comentó al Grupo Popular que si votan de forma favorable a esas cuentas nacionales, pondrán una partida para el puerto. Imbroda le respondió que si el Ministerio de Fomento firma el convenio para dar el dinero a Melilla para el proyecto, votará a favor.
“Ustedes llegaron al Gobierno nacional por dos bombas, una el 11 de marzo de 2004 desgraciadamente para todos los españoles y legítimamente porque se votó; y ahora con los catalanes separatistas, con los de Bildu y todo lo peor que no quiere a España. Así están ustedes en el Gobierno”, dijo Imbroda. Estas afirmaciones provocaron que Rojas solicitara, más tarde en su nueva intervención, que el presidente retirara esas declaraciones. Al retomar la palabra Imbroda, dijo que no pretendía ofender a las víctimas de los atentados, sino indicar que eso cambió el voto de los ciudadanos.
Además de esta polémica, Rojas protagonizó otro cruce de declaraciones con los populares. Dijo que Pedro Sánchez planteó la moción de censura por una sentencia judicial en el que se indicaba que el PP es “un partido corrupto”. Los ánimos se caldearon en el Grupo Popular, pero aún se elevó más porque la socialista afirmó que el PSOE no tiene ninguna foto con otros partidos y, en cambio, el PP sí la tiene con Vox.
“Entiendo que hay gente que esté cómoda con esos pactos porque la diputada Paz Velázquez apoyó a ese partido en las elecciones europeas. Pero ese partido es prácticamente anticonstitucional. Es un partido heredero del franquismo, como, y perdonen, lo son ustedes también”, remarcó la líder socialista en el pleno.
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