Siete inmigrantes de origen subsahariano han conseguido la madrugada de este domingo acceder a Melilla saltando la valla en una nueva noche de presión migratoria, que supone el quinto incidente en el perímetro fronterizo con Marruecos durante las últimas dos semanas y el tercero en cuatro días. En 15 días han llegado a la ciudad 388 migrantes de manera irregular en cinco saltos a la valla. En los últimos cuatro días han sido 249 inmigrantes los que lograron acceder a la ciudad. Pese al refuerzo de seguridad en el perímetro fronterizo, en el que han participado miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, así como la Policía Local, no han podido evitar que accedan ese número de migrantes aunque lograron contener a una parte importante de personas.
El último salto
Delegación del Gobierno informó de que sobre las 6:05 horas de este domingo, un grupo de unos 50 subsaharianos provistos de garfios, se aproximaron al vallado por la zona del Barrio Chino. Gracias al dispositivo anti intrusión de la Guardia Civil, que estuvo desplegado durante toda la noche, se evitó que la mayoría de ellos pudiera acceder a Melilla. En la contención del salto colaboraron el Cuerpo Nacional de Policía, así como las fuerzas de seguridad marroquíes. Los migrantes fueron trasladados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), lugar en el que pasarán la cuarentena en las dependencias que se han habilitado para ello. Allí, inicialmente, mientras esperaban en la puerta de acceso del centro, les dieron agua, pan y mascarillas. Cuatro de los siete migrantes que llegaron a la ciudad este domingo afirmaron ser de Mali. Este intento de entrada, en el que ha participado un grupo más numeroso que ha podido ser contenido por el dispositivo de seguridad, se ha producido en la zona cercana al paso fronterizo de Barrio Chino, la misma donde el pasado jueves más de 300 inmigrantes intentaron saltar el perímetro y 238 lo lograron. Este punto del vallado ha mantenido el refuerzo de varias patrullas y agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional hasta pasadas las 8:00 de la mañana y carece, justo en el tramo donde se ha producido el intento de entrada, de los peines invertidos instalados recientemente por el Ministerio del Interior en los puntos vulnerables. También en el dispositivo intervino la Policía Local, cortando el tráfico en la circunvalación en el tramo entre el paso fronterizo de Barrio Chino y el aeropuerto. De igual modo, ha participado el helicóptero de la Guardia Civil, que ha sobrevolado el perímetro para intentar detectar los movimientos del grupo que se ha aproximado al perímetro. Este es el tercer salto que se produce en cuatro días y el quinto dos semanas.
Cinco saltos
El pasado 12 de julio más de 200 subsaharianos intentaron acceder a Melilla por la zona comprendida entre Barrio Chino y Beni Enzar, lográndolo 119, informó Delegación del Gobierno. Como consecuencia de las acciones hechas para evitar el salto, cinco agentes de la Guardia Civil resultaron heridos leves, uno de los cuales ha causado baja para el servicio. Un día más tarde, el 13 de julio se produjo otro salto a la valla, en el que 20 migrantes lograron llegar a la ciudad. La presión migratoria se sintió con fuerza el pasado jueves 22 de julio cuando se produjo un salto masivo a la valla. Delegación del Gobierno informó de que 238 subsaharianos lograron entrar a Melilla tras un salto a la valla a la altura de Barrio Chino. El suceso ocurrió sobre las 06:50 horas en el que 300 personas intentaron sobrepasar el perímetro fronterizo. Los migrantes estaban provistos de garfios con el fin de escalar el vallado, comunicó Delegación del Gobierno. Asimismo indicaron que a pesar de que el dispositivo anti-intrusión de la Guardia Civil estaba implantado a lo largo de todo el perímetro, han logrado acceder a Melilla 238 personas, todos ellos varones. En ese salto tres guardias civiles resultaron heridos de carácter leve, dos de ellos como consecuencia de las heridas producidas por los garfios. Un día después, el 23 de julio nuevamente se activó el dispositivo anti intrusión por la presión en el perímetro fronterizo. Esa noche dos personas accedieron anoche por Aguadú y otras dos por Barrio Chino. La primera entrada, tuvo lugar alrededor de la media noche por la frontera norte de la ciudad. Un grupo de inmigrantes intento acceder por el último tramo de valla que da al mar, pero cuatro patrullas de la Guardia Civil se dirigieron a la zona. Los que consiguieron acceder al vallado fueron retenidos allí hasta que las patrullas de la Benemérita se los llevó uno a uno. Mientras, la Policía marroquí buscaba al otro lado con linternas por si quedaba alguna otra persona escondida entre las rocas o el mar para entrar. Al mismo tiempo, dos malienses, de 20 y 28 años, accedieron por la zona de Barrio Chino.