El carril bici, un proyecto del que se ha hablado mucho en nuestra ciduad, será una realidad el año que viene. Así lo anunció ayer el titular de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, quien aseguró que la iniciativa está en fase de contratación y que el crédito para ponerla en marcha se encuentra en Intervención para ser aprobado. Esta zona especial para el tránsito de bicicletas se colocará en el Paseo Marítimo, restando espacio a los coches, que perderán uno de los railes de circulación. Con esta medida, además de dar espacio a este medio de transporte que no contamina, se pretende que los vehículos circulen realmente a 30 kilómetros por hora en la zona.
Por otro lado, en el afán de la Consejería por ganar espacios urbanos para las bicicletas y los peatones, pondrá en marcha un proyecto de bicis urbanas, que conllevará la inversión de 12.000 euros para la adquisición de 150 de estos vehículos que serán de titularidad pública.
Además, Medio Ambiente pretende fomentar la proliferación de zonas peatonales en las que los coches no tengan prioridad. Por ello, Quevedo anunció ayer que se colocarán 10 nuevos aparcamientos de bicicletas de acero inoxidable, repartidos entre las calles Ramirez de Arellano y O’Donell. El responsable de esta área remarcó que, tras varias encuestas realizadas por los técnicos, han llegado a la conclusión de que la gente teme que le roben estos vehículos si los dejan aparcados en la calle. Por lo tanto, el consejero comentó que los estacionamientos se colocarán frente a edificios oficiales o privados, con el fin de garantizar que haya tránsito de personas.
También se colocarán estos aparcamientos en el interior de algunos edificios públicos, para que los conductores de los mismos no tengan que dejarlos en la calle y sientan la seguridad de moverse con ellos en lugar de con los coches. Se trata, en definitiva, de fomentar el transporte limpio.
Los trayectos al ‘cole’, caminando o en bicicleta
Desde hace unos años se está empezando a escuchar hablar del concepto de ‘caminos escolares’. Se trata de una especie de rutas que se organizan para que los niños, incluso los que no son tan mayores, puedan ir seguros y caminando desde su casa hasta su centro educativo. Uno de los objetivos que se ha marcado la Consejería de Medio Ambiente y su titular, Manuel Ángel Quevedo, es seguir fomentando este tipo de desplazamientos hasta los colegios e institutos, puesto que muchos de ellos pueden suponer que salga un coche menos a la calle en hora punta, evitando así atascos, ruidos y contaminación.
Según expuso ayer Quevedo en rueda de prensa, actualmente hay 7 caminos escolares, dos para ir al colegio Hipódromo, cinco para La Salle, uno para el Enrique Soler y otro para el Reyes Católicos. Sin embargo, el también vicepresidente de la Ciudad espera que a finales de año haya nueve trayectos.
“Ahora mismo tenemos a 100 niños que van a pie a sus colegios. Esto supone 100 coches menos en las calles”, informó el consejero de Medio Ambiente.
El responsable del Gobierno local también informó de que Melilla ha sido inscrita en el proyecto europeo Stars, que pretende establecer caminos escolares, pero en bicicleta. En un principio, dos centros de la ciudad se han interesado por la iniciativa, disponible para chicos de 5º de Primaria y 2º de la ESO. La Ciudad pondrá las bicis, los chalecos y los cascos.
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