Durante las tardes de esta Navidad se pueden ver a decenas de niños y niñas haciendo cola con sus padres en el bibliobús ubicado en el parque Hernández. Todos quieren participar en esta actividad en la que van a colorear, recortar e incluso diseñar adornos de navideños en papel. Una de las participantes es Rani, quien ha dibujado un muñeco de nieve y una bola para decorar el árbol de Navidad que tiene en casa. Hay otras que repite, como Nomidia, que esta vez participa en el taller y tendrá que decorar una cartulina con las doce uvas y con el número 2022 en purpurina.
Nerea, una de las monitoras, explica que tienen dos tipos de talleres. Uno de ellos es al aire libre con aforo ocho niños de 5 a 12 años; en este taller hace manualidades y cada día hay una temática distinta, siendo la de este martes fin de año. Dentro del autobús, lo que tienen es más bien servicio de guardería con niños de 4 a 10 años. Ahí se quedan y pueden disfrutar de la ludoteca, les ponen películas, hay cuentos para leer y juegos como el Parchís o la Oca. También tienen cajas de lápices para dibujar y colorear.
Cada día, en el autobús atienden entre 30 y 40 niños y en los talleres, al ser dos turnos, se permiten 16 participantes al día. Los más mayores prefieren ir al taller porque recortan o trabajan con pegamento. Los más pequeños, que necesitan más ayuda, suben al autobús y ahí las monitoras les ayudan a hacer sus creaciones.
Para participar, los pequeños tienen que ir con un adulto que facilite su D.N.I. y que se encargue de recoger al niño o la niña cuando acabe la actividad a la hora. Nerea asegura que está siendo un éxito la iniciativa navideña, recalcando que en ocasiones no han abierto aún y ya hay una fila de gente esperando; dice que están "encantadas" porque el bibliobús está teniendo acogida y "que la gente se dé cuenta de que esto lo hacemos por los niños".