Mi médico de cabecera me atiende... en unos 15 días

Una paciente critica que le den una cita con su médico cuando éste está de vacaciones. Ahora debe esperar dos semanas para volver a la consulta.

Lleva dos semanas esperando una cita muy importante, la que tiene con su médico de cabecera. Pero le toca ‘aguantarse’ un ‘poco’ más de tiempo. Resulta que su doctora está de vacaciones y claro, si lo que tiene no es grave, no le queda otra que solicitar una nueva cita médica. Y, ¡sorpresa! Le toca esperar otros 15 días más. Así lo denunció ayer a El Faro una paciente que asegura que la Atención Primaria cada día está en peores condiciones. No le echa la culpa a su médico, que tiene todo el derecho de descansar, pero afirma que ella también tiene derecho de recibir una atención sanitaria de calidad.
La historia de la paciente comenzó hace 15 días, cuando se acercó al centro de salud de la calle General Polavieja. Quería pedir una cita con su médico de cabecera. No es nada urgente, pero le gustaría hacerse un estudio o que la revisase porque tiene muchas molestias en el estómago.
Desea consultarle a su médico su malestar físico desde hace un par de días, pero nadie en el centro de salud le coge el teléfono para que den una cita sin tener que ir en persona al ambulatorio. Como no consigue dar con la hora en la que la puedan  atender, se da por vencida y acaba acercándose al centro de salud para pedir la cita en la ventanilla.
Su cara se desencaja cuando le dicen que su médico está de vacaciones y que nadie la puede ver esos días. “A menos claro, que sea una cosa urgente”, le dice una administrativa del centro.
Pero la cosa es aún peor. No hay ningún hueco posible en  la agenda de su doctora hasta dentro de dos semanas. Tiene que esperar 15 días para que la atiendan. Como no le queda otra y no es nada ‘urgente’, se conforma y coge la cita.
Ayer se cumplían estos 15 días de espera. Subió las escaleras del centro de salud de General Polavieja y se encuentra con cartel en el que indica que todas las citas se han cancelado. Una sorpresa más que se lleva. Con cara de enfado va a administración y le dicen que su médico está de vacaciones.

Pérdida de tiempo
Está muy indignada porque pidió media hora en el trabajo para nada. Por su puesto, nadie le avisó ayer de que su médico aún seguía de vacaciones. Denuncia que le dieran una cita hace 15 días para una fecha en la que su doctora no iba a pasar consulta. Le han hecho perder su tiempo.
¿Y qué solución le ofrecen? La primera de ellas es que le concertaran una cita el mismo día con otro médico, sobre todo, si es una consulta urgente. Claro la hora que le ofrecen es cuando el resto de los doctores atiendan a sus propios pacientes, es decir, más allá del mediodía. No puede quedarse tanto tiempo en el centro de salud ni puede volver a última hora. Rechaza esta opción.
La otra es que le den una nueva cita con su médico. Acepta. La administrativo mira en el ordenador y de nuevo otra sorpresa. No hay ningún hueco hasta el 5 de marzo. Vaya que tiene que esperar dos semanas más.
En resumen, las molestias que tiene el estómago la van a fastidiar por lo menos 15 días más, siempre que no decida ir a urgencias antes. Así que al final estará más de un mes con dolores en el estómago.
La trabajadora de administración le ofrece otra alternativa, que en unos días, cuando se reincorpore la doctora, llame el mismo día que quiera la cita entre las 8:00 y las 9:00 horas para conseguir diez minutos con su médico. Pero claro esto sólo será posible si le cogen el teléfono, afirma la paciente.

Una atención de calidad
Las demandas de la usuaria del centro de salud de General Polavieja no son muy exigentes. Lo único que pide es que si hay citas concertadas con los pacientes, que haya un médico que las atienda. Ni más ni menos que eso. Quizás la mayor parte de los enfermos que van a los centros de salud son personas jubiladas que no tienen nada más que hacer, pero el resto de los pacientes tienen muchos más compromisos, como trabajar, asevera. Por ello, pide que cuando un médico esté de vacaciones, algo que la Administración sabe con tiempo y que dura varios días, se ponga a un sustituto en su lugar. Esto no sólo evitaría escenas como la que vivió ayer, sino que también ayudaría a que el resto de doctores del centro de salud no vieran incrementada su cartera de enfermos. Un médico de vacaciones, un sustituto que le pase la consulta. Fácil y sencillo, afirma.
Claro, si la Administración no puede contratar a un doctor para estos casos, mucho menos se imagina la posibilidad de que le avisen si se cancela la cita, pero por pedir que no quede, apunta.
Por otro lado, resalta que no es posible que una persona tenga que esperar 15 días para tener una cita con su médico de cabecera. Eso es un ‘síntoma’ de que el sistema de salud no está bien. Comprende que en el mismo día o al siguiente tenga toda la agenda completa, pero que no haya ningún hueco en dos semanas implica que su doctora está hasta arriba de pacientes. ¿Necesita Atención Primaria más médicos? Por sus vivencias y las que le quedan, su respuesta es sí.