Prácticamente se acabó el mes de julio y, con él, los campamentos de verano que impulsaron las Hermanas de María Inmaculada junto a la ONG Save The Children y en los que participaron 227 niños y niñas tutelados por la Consejería de Bienestar Social. Los menores, de seis a 17 años y que están internos en los centros de La Purísima y La Gota de Leche, celebraron ayer una clausura en el centro de María Inmaculada. No faltaron los coloridos globos, música y la entrega de premios, como camisetas, para los ganadores de los concursos y torneos que celebraron a lo largo de este mes.
Durante la primera quincena del mes de julio, 110 niños participaron en los campamentos de verano, en los que desarrollaron múltiples actividades y juegos de carácter lúdico y educativo en distintas partes de la ciudad. La playa, la plaza Multifuncional y otros lugares se convirtieron en los escenarios de estos talleres, que estuvieron dirigidos por 42 monitores voluntarios. Durante la segunda quincena, otros 117 niños se beneficiaron de estos campamentos de verano.
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, agradeció todo el esfuerzo y la implicación a estos voluntarios y el compromiso de las Hermanas de María Inmaculada y de Save The Children. La ONG se hizo cargo de todo el presupuesto de estos campamentos para asegurarse de que se cubrían todos los gastos y se llegaba al máximo número posible de menores.
Ventura recordó que éste ya era el segundo año en el que se celebraba este tipo de actividad y se mostró animado para seguir con esta iniciativa, la cual catalogó de “experiencia integradora” y “enriquecedora”, tanto para los niños tutelados como para los propios monitores, que se mostraron ilusionados y pacientes.
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aprovechó el encuentro en el centro de María Inmaculada para aclarar la gestión del Comedor Social San Francisco que actualmente lleva Serunion. El sindicato UGT denunció anteayer que esta empresa especializada en restauración habría despedido de forma irregular a uno de sus empleados por cuestiones sindicales. A su vez, la organización de trabajadores criticaría las malas condiciones en las que desarrollarían su labor los empleados del comedor.
Preguntado por estas acusaciones, Ventura señaló que el despido de uno de los trabajadores era una cuestión interna de la empresa que deberá resolverse por la medida que corresponda. Por otro lado, indicó que desde su consejería se llevaba haciendo un seguimiento de estas “irregularidades” en la gestión del comedor San Francisco desde hacía un tiempo. El consejero explicó que Serunion no terminará su contrato “por cuestiones como que no les sale rentable la gestión o no les resulta interesante” la labor que desempeñan.
A pesar de que todavía no se conoce la fecha de cese del contrato, Ventura ya explicó que otra empresa que estuviera interesada en llevar a cabo el servicio de restauración podría tomar el relevo en funciones en cuanto se le propusiera. Todo ello sin concurso público, sólo con la selección de otra empresa que hubiera participado en el proceso inicial. Aunque Ventura no dijo ningún nombre, UGT hace dos días señaló que la empresa sustituta en la gestión del Comedor Social San Francisco podría ser Clece.
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