Después de dos semanas y media, desde el pasado día 15 de junio cuando Eduardo de Castro fue elegido presidente de la Ciudad, Melilla ya tiene formado su nuevo Gobierno.
La negociación entre Coalición por Melilla, PSOE y Ciudadanos ha sido larga y complicada. Los tres líderes de los partidos han intentado durante estas semanas hacer valer el peso de su representatividad en la Asamblea para forzar el reparto de consejerías a sus propios intereses. Al final, tanto Aberchán como Rojas y De Castro han reconocido la generosidad de todos a la hora de saber ceder para lograr conformar un Ejecutivo.
El resultado final ha sido, como era de esperar, que CpM obtuviera un mayor número de Consejerías debido al número de diputados que ostenta en comparación con las otras formaciones. Pero también De Castro ha logrado su objetivo de situar a un técnico independiente en el área de Hacienda y Economía que pueda fiscalizar los gastos y los presupuestos de la Administración.
Por su parte, el PSOE concentrará gran parte de su influencia en el Gobierno en la figura de Gloria Rojas, que además de consejera será vicepresidenta y portavoz del Ejecutivo.
Ayer, tras la presentación del nuevo equipo de trabajo, todos aseguraron sentirse satisfechos con el resultado final que parece haber cubierto las expectativas previas.
Ahora, queda decidir como se repartirán algunas empresas públicas, como la televisión, el puerto o Emvismesa.