Melilla registra 2 delitos de odio por orientación sexual en 2021, pero hay muchos más

El Ministerio del Interior presentó el informe de la evolución de delitos de odio en 2021. En España, este tipo de sucesos a causa de la orientación sexual de una persona, se han disparado hasta alcanzar el 67% de los casos. Mientras tanto, Melilla tan solo registró 2 delitos de estas características durante el año pasado. Sin embargo, son muchos más los que se esconden y no llegan a ver la luz de manera oficial.

En el informe expedido por el Ministerio del Interior se define este tipo de delitos de odio como cualquier hecho que señale la existencia de un móvil de odio o discriminación hacia la víctima por su orientación sexual o identidad de género. Pueden ir desde agresiones, insultos, acoso o incitación pública al odio, atentando contra la dignidad de las personas. 

Jesús (nombre ficticio) es un joven melillense que ha hablado con El Faro a causa de estos datos reflejados en el informe anual de 2021. Es un ciudadano natal de la ciudad y residente en ella. 

Comenta que a veces ha escuchado por la calle algún que otro insulto a sus espaldas, normalmente proliferado por un “grupito”, pero nunca por una persona sola. En esas ocasiones intenta hacer caso omiso, pero hay veces que no puede callarse.

Relata la vez que volvía de hacer la compra y estaba llegando a su casa en el coche. Mientras aparcaba, escuchó a alguien gritar “maricón”. Provenía de un “grupillo” con el que ya había tenido problemas antes en su barrio porque hacían ruido por las noches. Cuando los miró, todos estaban callados.

Subió las bolsas a su casa, guardó todo y entonces bajó a la calle para volver a buscarlos. Al volver ya se habían dispersado, pero encontró a uno de ellos. Le enfrentó diciéndole que nunca más quería volver a escuchar que él o uno de sus amigos le volviera a decir nada. Ante eso, el agresor “se quedó callado”.

“¿Qué hago? ¿Me callo y que me lo digan todos los días? Una cosa es que vayan por la avenida y otra que vivan aquí y los tengo en la esquina a diario”, cuenta Jesús. 

Este tipo de situaciones ya las sufrió cuando era pequeño en la escuela y afirma que ahora es algo que no piensa tolerar. “Yo eso ya lo pasé en el colegio y callarse es lo peor”. 

Asegura que si deja pasar este tipo de altercados, aunque sea una vez, se verán en la potestad de gritarle cuando quieran, sin importar que vaya con su pareja, sus amigos o su familia. 

Sin embargo, este es uno de los pocos casos aislados en los que el agredido verbalmente responde. No son muchas las personas que deciden plantar cara a sus agresores y, menos aún, denunciarlos. A diario ocurren muchos más casos como este (con insultos y agresiones más graves) en las calles de la ciudad y solo unas cuantas víctimas tienen el coraje de hablar sobre lo ocurrido.

Desde Amlega explican a El Faro que pueden llegar a registrar más de veinte casos de este tipo al año. Aseguran que en 2022 se han denunciado varios delitos de odio realizados en su mayoría a través de las redes sociales. Las víctimas, en muchos casos, suelen ser jóvenes y menores de edad. 

Algunos de estos delitos se camuflan como situaciones de acoso en los colegios. Hay menores que han llegado a la asociación porque, además de insultos, recibían distintos tipos de agresiones por parte de sus compañeros debido a su orientación sexual. Pero este tipo de bullying no solo se quedaba en el centro, sino que también lo sufrían a través de las redes sociales o whatsapp.

No obstante, son pocos los casos como este que llegan a denunciarse, puesto que, al ser menores, los padres prefieren mantenerse al margen. Aún así, en la asociación melillense mantienen un registro de todos las personas (anónimas o no) que acuden a la asociación sufriendo este tipo de agresiones.

Desde este año Amlega cuenta con el Equipo de Respuesta a los Delitos de Odio (REDO) de la Guardia Civil para atender a las personas que han sufrido o han sido testigos de delitos de odio. Este equipo lleva a cabo un seguimiento de las conductas de odio y controla las denuncias recibidas. Su objetivo es “afrontar esta problemática de manera integral y transversal”.

En una publicación de sus redes sociales, la asociación afirmaba que todos los delitos de odio que tuvieron lugar durante el XVIII Orgullo del Norte de África fueron puestos en manos de este equipo y que se habían abierto las investigaciones pertinentes.

Son muchas las personas que, aunque llegan a la entidad porque sufren delitos de odio, no se atreven a denunciar por miedo a verse expuestos públicamente. Destacan un caso reciente de un hombre de treinta años que sufría este tipo de agresiones por parte de su pareja pero que, tras ponerse en contacto con Amlega y la Guardia Civil, finalmente no puso la denuncia.

En España se registraron un total de 1.802 casos; de estos, 466 se debieron a la orientación sexual. Amlega anima a todos aquellos que sufran o sean testigos de delitos de odio a ponerse en contacto con la Guardia Civil o hacerlo a través de ellos mediante el teléfono 951 636 555.

La Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio (ONDOD) implementó una encuesta sobre estos delitos en la página web del Ministerio del Interior, como parte de las medidas que forman parte del I Plan de Acción de lucha contra los delitos de odio (2019-2021). Mediante este sistema, de participación voluntaria y anónima, se pretende dar a conocer la mayor parte de delitos de odio ocurridos en España, así como comprender el sentir de las víctimas, la percepción social, los principales motivos de discriminación o el trato policial recibido, entre otros aspectos.