Melilla reduce un 2% la plantilla de empleados públicos en el último año

La Administración autonómica fue la que más puestos de trabajo recordó entre enero del 2013 y enero del 2014, un 5,3% l En total, se ha pasado de 9.865 empleados públicos a 9.666 en la ciudad

¿Cómo afecta la crisis a los funcionarios? Esa pregunta se la han hecho muchas veces en los últimos seis años trabajadores de empresas privadas y sobre todo desempleados que han perdido su puesto y se han arrepentido de no haber optado en su momento por la Administración pública. Sin embargo, la coyuntura económica también ha obligado a las administraciones a reajustar presupuestos y minimizar gastos, algo que ha repercutido directamente en el personal. En enero de este año había en nuestra ciudad 9.666 empleados públicos, trabajando para la Administración local o central. Un año antes esta cifra ascendía a 9.865, es decir, se ha producido un descenso del 2% de los empleados públicos, con una reducción de 199. Si se echa la vista un poco más atrás en el tiempo se comprueba que desde el 2011, el descenso ha sido del 4,2%. En aquel momento, la cifra de empleados ascendía a 10.094.
La cifras del último Boletín Estadístico del Ministerio de Hacienda, publicado esta misma semana, indican que la mayor reducción de puestos de trabajo se produjo en el personal de la administración autonómica, es decir, los empleados de la Ciudad. En concreto, si en enero de 2013 había 1.505 trabajadores, un año después la cifra se redujo hasta los 1.425, lo que supone una caída del 5,3%, con una reducción de la plantilla de 80 personas en sólo un año.
En cuanto a la Administración estatal, también se produjo una disminución en el número de empleados en nuestra ciudad. En enero de este año había trabajando para organismos dependientes del Gobierno central 8.104 personas, 118 menos que un año antes. Es decir, la plantilla se redujo un 1,4% en sólo un año.

Más del 10% de la población
A pesar de este descenso en la cifra de trabajadores públicos, Melilla sigue siendo junto a Ceuta, la región con un porcentaje más alto de su población trabajando para la Administración. En concreto, en enero de este año había un trabajador público por cada 8,6 habitantes. Es decir, los funcionarios representaban más del 10% de la población total, tomando como referencia los datos de población publicados la semana pasada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este índice es exactamente el mismo en la ciudad caballa, donde en el primer mes de este año había 9.721 trabajadores públicos.
En el conjunto del país, había un trabajador público por cada 18,2 habitantes al inicio de este año. La región con menos porcentaje de empleados de la Administración era Cataluña, donde había uno por cada 24 residentes. Junto a las dos ciudades autónomas, Extremadura fue la tercera región con más funcionarios, con uno por cada doce habitantes.
Las cifras del Boletín de Hacienda apuntan, además, que en la mayoría de las regiones se registró un descenso del número de trabajadores públicos entre enero de 2013 y enero de 2014. En Ceuta, esta bajada fue del menos del 1%, con la reducción de 87 personas en la plantilla total. En el conjunto del país, el descenso fue del 0,99%, lo que apunta que la bajada en Melilla duplicó la media nacional.

Algunos incrementos
Además, hubo cuatro regiones en las que el número de trabajadores de la Administración se incrementó en estos doce meses. Es el caso de Andalucía, donde se pasó de 470.426 empleados a 478.250, Aragón, que en enero de 2013 tenía 88.320 trabajadores y un año después 88.488, La Rioja, donde se pasó de 16.346 a 16.551 y Asturias, que al iniciar este año contaba con 58.702 empleados, frente a los 57.569 del inicio de 2013.
En términos absolutos, Andalucía es la autonomía con más trabajadores públicos de todo el país, seguida de Madrid, Cataluña y Valencia.
Los datos del Ministerio de Hacienda demuestran lo que los ciudadanos han comenzado a detectar ya hace algún tiempo, que las administraciones están tratando de adaptarse a los tiempos que corren, minimizando el gasto, con el objetivo de lograr sacar al país de la crisis.