El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, aseguró que hay “preocupación” en el Gobierno local ante el anuncio del director de Aduanas de que el comercio atípico se va a acabar en Melilla y Ceuta. “Siempre hay una preocupación cuando afecta a familias y gente que está trabajando”, afirmó. En cuanto a las alternativas para compensar las pérdidas que provoque la desaparición de esta ‘actividad’, propuso bajar el IPSI y atraer a empresas digitales.
De Castro indicó que no podemos olvidar tampoco que Marruecos es un país soberano y “puede hacer con su comercio lo que crea conveniente, aunque nosotros no estemos de acuerdo”.
En cuanto a las soluciones a este problema, el presidente de la Ciudad dijo que se puede bajar el IPSI; atraer a empresas digitales o de transformación pequeña; acuerdos comeciales con Marruecos y otros países de África, entre otras cuestiones. También hay que mejorar las comunicaciones y que la industria del turismo pueda “florecer”, indicó. “Hay que financiar para que vengan los empresarios de nuevas tecnologías y que hay que aprovechar también la coyuntura del Brexit”, aseveró. De hecho, el máximo responsable del Ejecutivo local comentó que ya se comenzó a atraer empresas como las del juego online. Insistió en que hay que buscar en esos nichos de empresas que no necesitan muchos espacios. Dijo que en Gibraltar hay miles de empresas y es un espacio muy reducido.
De Castro también apuntó que el director de Aduanas de Marruecos tiene mala memoria en una cuestión y aseveró que coincide con el presidente del PP de Melilla, Juan José Imbroda, en que la ciudad es España antes de que nacieran los ascendentes de este alto cargo público.
“Eso no va a cambiar. Esto no es un aeropuerto ni una aduana de cualquier manera. Esto es un país y tiene una frontera con un tercer país que se llama Marruecos. Lo suyo es que el principio de solidaridad y proporcionalidad se mantenga”, remarcó el presidente de la Ciudad.
También argumentó que hay que tener una buena relación con los vecinos, con independencia de quién sea, aunque debe ser recíproca esa actitud.
De Castro recordó las palabras de Imbroda en las que aseguraba que era momento de mirar al norte. El presidente de la Ciudad aseveró que hay que hacer esto y también mirar al sur porque tenemos como vecino a Marruecos. “¡Vamos a llevarnos bien!”, afirmó.
Por otro lado, hizo referencia a las declaraciones del lunes del secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, que indicó que Beni Enzar “funciona de manera correcta, pero siempre es mejorable”. De Castro reconoció la inversión en tecnología que se ha realizado en este paso fronterizo con la incorporación de cámaras de reconocimiento facial.
Sin embargo, apuntó que, toma la palabra al secretario de Estado y espera más mejoras, y que cree que las cámaras de reconocimiento facial deberían ponerse en el resto de pasos fronterizos porque siempre nos podemos encontrar “con la picaresca” de que una persona no pueda entrar por una orden o requerimiento judicial usará otra frontera para evitar ser reconocido en Beni Enzar.
No obstante, De Castro cree que esto último está “en la mente del ministro del Interior” y afirmó que están a disposición de éste para abordar los temas que sean necesarios.
También hizo referencia el presidente del Gobierno local a una reunión que mantuvo la semana pasada con la vicepresidenta del Ejecutivo central, Carmen Calvo, sobre seguridad.
“Es muy consciente de lo que pasa aquí y de todos los problemas que hay por la frontera, desde el comercio atípico a los menores extranjeros no acompañados o los inmigrantes ilegales. Dijeron que estaban en ello y que íbamos a ver medidas a corto plazo en las que se iban a materializar ese control, que todo el mundo reclama, de esta frontera que debe ser fuida y estándar como debe ser cualquiera en Europa”, remarcó De Castro.
El dirigente del Gobierno local remarcó que la frontera de Melilla debe ser una frontera similar a la que se tiene en Europa con Turquía. “Eso es lo que se está mirando. Aquí no solo tiene que implicarse el Gobierno central, sino también, y lo dije en aquella reunión, Europa. Somos frontera sur europea, aunque no le guste a Marruecos”, subrayó.
Por otro lado, en estos días se ha producido una controversia sobre este tema a raiz de las declaraciones del vicepresidente del Gobierno central, Pablo Iglesias, asegurando que no habrá más, y que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, está de acuerdo con sus palabras, mientras que el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, aseveró que no le constaban estas afirmaciones sobre el ministro del Interior. Al respecto de este asunto, el presidente de la Ciudad remarcó que hay una sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de la UE que hay que respetar.
De Castro aseveró que se trata de un caso muy concreto y “simplemente hay que aplicarlo”. “Evidentemente no se puede entrar en un país pegando porrazos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que custodian este país y tenemos una frontera”, dijo.
El presidente de la Ciudad remaró que “nadie ha dicho que se vaya a echar a palos” a los migrantes y no hay que tergiversar esa sentencia porque hace referencia a un caso muy concreto.
El Gobierno de Melilla consideró este martes que Marruecos "debe ponerse las pilas de una vez por todas" y asumir a los menores extranjeros no acompañados que han llegado al territorio español y proceden de aquel país, ya que "también es su responsabilidad" y la situación ha dado lugar a "un problema acuciante" en las dos ciudades autónomas. El presidente melillense, Eduardo de Castro,subrayó que Melilla y Ceuta soportan un porcentaje "muy desproporcionado" de menores extranjeros no acompañados respecto a cualquier otra región de España.
En el caso de Melilla, De Castro dijo que la Ciudad Autónoma está haciendo "más de lo que puede" porque acoge en estos momentos a muchos menores, casi 1.200 en diferentes centros de acogida. El presidente recordó que hay acuerdos firmados con Marruecos que dependen de que dicho país "quiera hacerlos efectivos", si bien afirmó saber desde hace cuatro meses que se había producido una reunión de fiscales en Rabat abordando el asunto de los menores extranjeros no acompañados y los dos países habían creado también un grupo de trabajo para ver cómo acelerar los procedimientos de readmisión. De Castro comentó tener la esperanza de que las reuniones de alto nivel con Marruecos sean fructíferas y se llegue a un acuerdo para minimizar esta problemática, que "es muy fuerte y tensa para Melilla", cuya solución pasa por "sacar a menores" de la ciudad, bien hacia la península, para lo que hace falta la solidaridad de otras regiones, o bien hacia Marruecos. En este punto, defendió el retorno de los menores a Marruecos porque "todo lo que sea volver con sus familias es bueno" y "donde mejor puede estar un menor es con sus padres", de ahí que haya expresado su rechazo a los casos de abandono que se están produciendo en Melilla.
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