Melilla homenajea a la Guardia Civil en el 125 aniversario de su llegada a la ciudad

La Guardia Civil cumple 125 años en la ciudad y los melillenses van a poder participar en varias actividades con las que se pretende reconocer la labor de este cuerpo y agradecer sus servicios.

El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, estuvo en Melilla La Vieja, junto al viceconsejero de Turismo, Javier Mateo, y el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla, Antonio Sierras, para ver las banderolas que se han instalado en la muralla junto a la plaza Pedro de Estopiñán. Les acompañaron un gran número de agentes.

Con este sencillo acto se da el pistoletazo de salida a todas las iniciativas que se van a desarrollar en las próximas semanas.

El presidente de la Ciudad destacó una de ellas será la entrega de la bandera de España a la comandancia. Será en noviembre cuando se realice este acto.

Imbroda subrayó que es preciso celebrar esos 125 años con la “sonoridad y la gratitud que requiere”. Indicó que la instalación de las banderolas en este lugar privilegiado de El Pueblo se debe a que cuando los melillenses pasen por este punto de la ciudad o las vean ondear desde abajo de la muralla podrán conocer que se celebra este aniversario.

El presidente de la Ciudad indicó que es importante reconocer y agradecer a la Guardia Civil su labor porque es importante no sólo para Melilla, sino para España, ya que es uno de los cuerpos que “vertebran” el país.

Imbroda charló unos minutos con los guardias civiles, tras realizarse una foto de familia, y les comentó que la Benemérita vino a Melilla en el siglo XIX, que fueron unos años “muy dramáticos” para la ciudad. Remarcó que el cuerpo actuó con generosidad.

La historia

Por su parte, la Guardia Civil informó de que estas banderolas ondearán con la enseña nacional y la de Melilla.

La presencia permanente de la Guardia Civil en la ciudad se remonta al primero de noviembre del año 1893, con ocasión de los graves sucesos en los que se vio envuelta, tras el ataque y asedio del Fuerte de Cabrerizas Altas.

Desde su llegada, los medios de comunicación ilustran sus servicios y hazañas, siendo el primero y más destacable el llevado a cabo ese mismo año con la localización de un importante depósito de armas en una casa del Barrio del Polígono, destinadas para su venta a los rebeldes que asolaban la ciudad, informó la Benemérita.

También comentó que sus actuaciones años más tarde, en el conocido como Desastre de Annual, con la heroica defensa de la ‘Fábrica de Harinas de Nador’ o el despliegue dispuesto de las fuerzas de la Comandancia en el Atalayón, para contener a las huestes de Abdelkrim que se dirigían a tomar Melilla, son muestras de su historia y vinculación permanente con ella. “Melilla, siempre fiel con la Guardia Civil, aportó y dotó con fondos propios sufragados por la Junta de Arbitrios, por valor de 84.290 pesetas, la construcción de su primera Casa Cuartel, finalizada en el año 1896, cuya puerta y lápida original permanecen hoy día en el salón noble de su actual sede, como recuerdo de gratitud”, añadió.

“La historia de la Guardia Civil con la ciudad no puede ser entendida sin la de sus gentes, nobleza, lealtad y generosidad, como bien indica su escudo”, remarcó la Benemérita en una nota informativa.

En este sentido, apuntó que los 125 años de la presencia de la Guardia civil en Melilla están avalados por “los innumerables servicios prestados en su misión de velar por la seguridad y libertad de sus ciudadanos”. Argumentó que los retos que asume con el espíritu benemérito y añadió que “el pueblo nos ha acuñado y refrendado como la Institución pública más valorada por los españoles”.

Por último, subrayó que “el compromiso con Melilla y sus ciudadanos ha sido, es y será permanente e inquebrantable”.