El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, destacó que se ha dotado de dos vigilantes más a La Purísima en los horarios “más críticos”, es decir, entre las 19:00 y las 23:30 horas. Subrayó que en ese tramo del día es cuando muchos menores vuelven para comer, ducharse y dormir. En cuanto a este centro de acogida, Ventura aseveró que está “hacinado”. Sin embargo, de momento, ha pedido que no se utilicen las tiendas de campaña que se solicitaron a la Comandancia General de Melilla (Comgemel). “Nos estamos resistiendo a utilizarlas porque no es el sitio más adecuado. Pero no nos va a quedar más remedio porque el viernes había casi 640 niños”, afirmó. De hecho, el consejero comentó que le queda sacar a 300 niños del centro de acogida y llevarlos a un pabellón deportivo. Pero reconoció que esto “generaría a Melilla muchos más problemas de los que tenemos”. Ventura aseguró que la Ciudad está “aguantando” lo que puede esta situación a pesar de las limitaciones que tiene y, por ello, resaltó que espera que el Gobierno central resuelva este tema “de forma urgente y solidaria y teniendo en cuenta los derechos humanos de todos los que vivimos en Melilla, de los propios niños y de los melillenses”. En este sentido, subrayó que se ha incrementado hasta un 40% el número de delitos cometidos por niños y jóvenes y se pregunta por qué la ciudad tiene que “soportar” esto y por qué el Estado “no hace algo”
Primera acogida
El consejero de Bienestar Social reconoció que ya no existe ese módulo de primera acogida como se planteó hace años. Comentó que actualmente hay unos 380 o 390 niños en esta área. En el resto de módulos, donde la vida es más estable para los niños acogidos, se han tenido que ampliar también las plazas. “Hay un hacinamiento importante. La denuncia la hacemos nosotros. No podemos más. No es un tema de que el Gobierno local no tenga capacidad, como criticará la oposición, que usa cualquier frase para atacar, en lugar de buscar una solución. Se trata de una situación insostenible”, afirmó. Ventura insistió en que no es un problema de falta de vigilantes o educadores, sino de que es preciso sacar a los menores de Melilla y, bien llevarlos a su país de origen y trabajar allí con las familias, cuya gestión corresponde al Estado, o bien repartirlos en otras autonomías o Europa.
Exigen más inversiones en el centro en personal e instalaciones
Fuentes consultadas por El Faro aseguraron que debe haber una mayor inversión en La Purísima, no sólo en mejorar las instalaciones, puesto que hay problemas aún con el saneamiento, sino también en aumentar el personal. Reclaman un mayor número de educadores y cuidadores para poder atender los diferentes módulos, aunque, sobre todo, para el de primera acogida. Estas fuentes aseveran que todas las noches hay peleas entre los chicos que acuden a cenar y dormir en el centro porque algunos de ellos están bajo los efectos de sustancias. Resaltaron que algunos menores han utilizado cuchillos para amenazarse entre ellos y que son chicos de entre 15 y 17 los que causan estos problemas. En cuanto a los vigilantes de seguridad, estas fuentes aseguraron que debe haber unos doce profesionales en cada turno y que no es suficiente con el incremento de dos más en horario de noche. Insistieron en que hay un “abandono” de este centro y son precisas más inversiones.