Melilla ha destinado 36 millones de euros a políticas de bienestar social, 14 a pymes y 5 a generar empleo

La consejera de Hacienda, Dunia Almansouri, ha asegurado que las cuentas de 2020 que se aprobaron el pasado miércoles en el pleno arrojan unas cifras positivas sobre la gestión del Gobierno local. Destacó, entre otros muchos gastos, la inversión de 36 millones de euros a bienestar social, 14 millones de euros de ayudas a pymes y 5 millones para políticas de empleo. Y añadió que se logró alcanzar el mismo porcentaje de ejecución que un año antes a pesar de estar 4 meses parados por la pandemia.

Almansouri también negó con rotundidad que hayan sobrado 100 millones de euros como se asegura desde algunas críticas recogidas en las redes sociales. Y explicó que hay partidas que pasan de un año a otro porque no se han terminado los proyectos o porque la facturación llega hasta el 31 de diciembre y se paga en enero del siguiente año.

La consejera de Hacienda comentó que en el año 2018 la ejecución presupuestaria fue de un 77% y en el año 2020 fue la misma cantidad, “décimas arriba o abajo”, puntualizó. Pero recordó que el pasado año la Administración estuvo paralizada durante casi cuatro meses debido al estado de alarma que se impuso con la pandemia de covid-19. Indicó que se suspendieron todos los plazos administrativos durante ese periodo y no se podía contratar ni hacer mesas de contratación. “Hubo una contención del gasto público por lo que pudiera pasar durante tres meses”.

“Una vez que se levantó la suspensión, hicimos lo imposible por ponernos al día y lo conseguimos”, añadió Almanosuri. En este sentido, destacó que se logró poner en marcha todos y cada uno de los contratos que se vieron paralizados y ejecutar el presupuesto.

De hecho, la titular de Hacienda comentó algunos datos que calificó de “significativos”. Apuntó que el gasto en la política de vivienda y urbanismo 15 millones de euros; en bienestar social 36 millones de euros; y en fomento del empleo fueron 5 millones de euros.

También destacó que el gasto en educación fueron 13,9 millones de euros; en la política del comercio, turismo y las pymes salieron 14 millones de euros; y Promesa también invirtió 12 millones de euros. “Este Gobierno ha cumplido. Ha ejecutado el presupuesto y con todas las adversidades”, reiteró Almansouri.

Por otro lado, la consejera dijo que sí que se ha contado con “un pequeño superávit que es la suma de los pequeños sobrante de la planificación presupuestaria” y en un 90 o 95%, casi de forma íntegra, se ha destinado a políticas sociales. En este sentido, recordó que son 5 millones que se han ido íntegros a la creación de empleo; y 1,3 millones a becas de la ESO y la Formación Profesional (FP). Además, recordó que las becas se han puesto al día y ahora se entregan a inicio de curso.

También recordó la titular de Hacienda que es cierto que se ha tenido que pagar 1 millón de euros, por un “pufo”, calificó pidiendo disculpas por usar esta expresión, “que nos dejó el PP con un bufete de abogados”. Afirmó que la Ciudad no quería abonar esas facturas y es que aseveró que había algunas muy antiguas, pero llegó una orden judicial que ha obligado a hacer este abono. “El PP tendrá que dar muchas explicaciones porque es un asunto que estamos investigando”, añadió

Otra pequeña partida, destacó Almansouri, se ha destinado a Deporte para que los clubes melillenses puedan también superar la situación de la pandemia y puedan seguir compitiendo.

Críticas en redes sociales: No sobran 100 millones

Almansouri indicó que se han recibido críticas en redes sociales y quería aclarar estas cuestiones de cara a la opinión pública porque hay personas que dan por buenas esas afirmaciones cuando no lo son. De hecho, negó con rotundidad que hayan sobrado 100 millones de euros, como se dice en esas críticas y reiteró que no son ciertas esas declaraciones que hay en redes sociales.

Explicó que una cuenta general de una Administración Pública tiene diferentes apartados y argumentó en qué consiste cada concepto. Apuntó que la incorporación de remanente son aquellas partidas que por la naturaleza del gasto no se han liquidado en el ejercicio presupuestario por diferentes motivos. Almansouri dijo que se trata de una foto fija que se hace el 31 de diciembre de ese año.

Para aclarar este concepto, la consejera de Hacienda puso dos ejemplos. Uno de ellos son los Planes de Empleo del año 2020 que comenzaron a final de año que es también cuando llega la ayuda del Estado para emprender este proyecto. Y por ello, no se pudo gastar todo el dinero a 31 de diciembre. De forma que ese dinero se incorpora al siguiente año y se siguen pagando las nóminas de los trabajadores de los Planes de Empleo. Y es que algunos de ellos estuvieron trabajando hasta agosto de este 2021.

Por lo tanto, Almansouri dijo que se trata de una partida que se recibe a finales de 2020 y se termina de ejecutar hasta agosto de este año. “No ha sobrado el dinero, sino que es un gasto que por su naturaleza comprende dos ejercicios presupuestarios y se va liquidando mes a mes”.

El otro ejemplo que describió la consejera de Hacienda es el contrato de vigilancia de seguridad de la Ciudad. Explicó que se trata de un servicio que tiene un coste de 360.000 euros al mes y que la última factura de diciembre, o incluso la de los últimos tres meses porque hay empresas que hacen esta facturación de forma trimestral, no se puede pagar a 31 de diciembre porque no ha terminado el periodo de devengo de la factura. De forma que se suelen presentar en enero esas facturas.

Todo esto lleva a que Hacienda se encuentra con numerosos recibos que son a 31 de diciembre y se tienen que pagar en enero. Y en este punto, la consejera matizó que la Ley de Presupuestos establece que se incluyan en el ejercicio en el que se recibe y no en el anterior “por ello se paga en 2021 con cargo al presupuesto de 2020”. Aseveró que son muchos más los ejemplos, como el canon del agua. Se paga a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en enero aunque sea un gasto del año anterior, pero se debe presupuestar en el 2020.

De esta forma, Almansouri dijo que se puede comprender por qué se incorpora de un año al otro este dinero. Y apuntó que lo mismo ocurre con obras o proyectos, porque se trata de un dinero público comprometido y no se puede invertir en otra cuestión diferente.

Por último, la consejera remarcó que éste ha sido el mayor presupuesto de la Ciudad en su historia, “que se ha ejecutado con lealtad y sobre todo, con lealtad a la situación tan complicada que se estaba viviendo”