Melilla registró la curación de 69 pacientes de coronavirus, según los últimos datos facilitados por el área de Salud Pública de la CAM y el Ingesa, frente a cuatro nuevos positivos, por lo que la ciudad baja de los 700 casos activos de COVID-19 hasta los 681.
En estos momentos hay 23 pacientes ingresados en el Hospital Comarcal, uno más que el sábado, cuatro de los cuales se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), cifra que se mantiene invariable por tercer día consecutivo y que supone mantener una ocupación por debajo del 24 %.
Con todos estos nuevos datos, la cifra histórica de contagios en la ciudad asciende a 6.811, de los cuales 6.065 se recuperaron y 65 han fallecido. Las últimas muertes se registraron la pasada semana.
En la última jornada, se realizaron 331 pruebas diagnósticas de las que 93 fueron PCR y 238 test de antígenos. Desde el inicio de la pandemia ya se han realizado 82.403 pruebas: 33.384 fueron PCR, 33.869 test de antígenos y 13.150 test de anticuerpos.
Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, Melilla continuaba liderando la estadística nacional en cuanto a la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, siendo la única región que se encuentra por encima de los 400 casos, concretamente 490,25, lejos de la media nacional, que es de 294,72.
En la ciudad también avanza la campaña de vacunación. Este lunes ya se ha comenzó a administrar vacunas al cuerpo Bomberos y está previsto que esta semana también continúen con el resto de cuerpos de seguridad.
Por otro lado, Melilla está a la espera de recibir casi cinco mil dosis de vacunas más. Actualmente ha recibido 4.350 vacunas, y ya se ha administrado un total de 4.094 dosis. De esta forma ya se ha puesto un 94,1% de las dosis adquiridas por la Ciudad Autónoma.
Hasta el momento son 1.262 personas las que han percibido la pauta de vacunación completa. Las campaña de vacunación continúa desarrollándose en la ciudad con el grupo 4.
496.080 dosis de de Pfizer
El Ministerio de Sanidad aseguró este lunes que ha comenzado la distribución a las comunidades autónomas de las 496.080 nuevas dosis de la vacuna contra el coronavirus de Pfizer/BioNTech que han llegado a España.
Sanidad informó este lunes en un tuit de que se ha iniciado la distribución del casi medio millón de dosis de la vacuna que ha recibido España este lunes.
Los últimos datos de vacunación ofrecidos por el Ministerio de Sanidad el pasado viernes indican que España ha distribuido un total de 3.622.165 dosis (de Pfizer, Moderna y AstraZeneca), a las que hay que sumar esta última remesa. Hasta el momento 1.171.026 personas han recibido la pauta completa de vacunación en todo el país.
Baja la incidencia a 252 casos
La incidencia de la COVID-19 en España ha seguido bajando desde el viernes y se sitúa ya en una incidencia acumulada de 252,19 casos en los últimos 14 días por cada 100.000 habitantes, casi en el límite de riesgo extremo de los 250 casos, según datos actualizado por el Ministerio de Sanidad este lunes.
Desde el viernes han sido diagnosticados un total de 20.849 casos nuevos y las comunidades autónomas han reportado 535 nuevas muertes el fin de semana, lo que revela también un descenso en la cifra de decesos frente a los 397 registrados aquel día.
La presión en las UCI también parece aminorar, aunque de forma más lenta, y se sitúa en un 33,02 %, un punto menos que el viernes, mientras que la ocupación de camas hospitalarias por enfermos de covid aumenta al 12,10 %, frente al 12,8 % del viernes, cuando cayó seis décimas respecto al día anterior.
La Comunidad de Madrid es la que mayor presión tiene en las UCI, con un 18,58 % de camas ocupadas, seguida de Ceuta (15,50 %) y Castilla y León (15,43 %).
Desde el viernes, España acumula 20.849 nuevos positivos, con lo que la cifra total de contagios desde el inicio de la pandemia se eleva a 3.153.971 y la de muertes a 67.636, de ellas 814 registradas en los últimos siete días.
En la última semana se hicieron un total de 997.292 pruebas diagnósticas que arrojaron un 7,69 % de positividad.
El director del Centro de Coordinación de Emergencias y Alertas Sanitarias, Fernando Simón, destacó que la incidencia acumulada sigue siendo alta y no permite “bajar la guardia más de la cuenta”, por lo que ha instado a las comunidades a evitar “una relajación excesiva de las medidas”.
Así, recordó que el nivel de ocupación en las UCIs sigue siendo importante, por lo que un nuevo aumento del ritmo de contagios podría hacer insoportable la presión sobre el sistema sanitario.
Simón hizo hincapié, sin embargo, en el descenso del resto de indicadores de la pandemia, que en el caso de la positividad de las pruebas de detección es "claro".
España ha superado ya los 32,4 millones de pruebas diagnósticas realizadas desde el inicio de la epidemia; en la semana del 12 al 18 de febrero, las comunidades han hecho 997.292 (142.470 al día), de las que 602.755 fueron PCR y 394.537 test de antígenos.
Así, el número de pruebas sube un 3 %, lo que eleva la tasa a 687,91 por cada 1.000 habitantes. Subrayó en ese sentido que la positividad esté ya por debajo del 7 por ciento y que sea así además en 14 comunidades autónomas.
También recalcó que la cifra de fallecidos no supere los mil desde hace dos o tres días, aunque ha insistido en que hay que mantener las medidas aprobadas por las comunidades autónomas.
Sobre la variante británica
Simón apuntó que la variante británica, de la que se han confirmado 898 casos en España, avanza a un ritmo algo inferior al previsto y supone en estos momentos entre un 25 y un 30 % de los casos.
Dijo que esta expansión es más lenta de la calculada inicialmente se debe a que la curva de contagios está en descenso y “la transmisión en España está ahora mismo muy controlada” después del incremento postnavideño gracias a las restricciones impuestas por las comunidades.
“Esto obviamente no favorece la transmisión, ni de las variantes circulantes habitualmente ni de la británica, la sudafricana o la brasileña”, lo cual no quiere decir que no se transmitan y vayan ocupando poco a poco espacio.
Así, los cálculos del Ministerio es que cada semana, la transmisión de la variante británica se iba a incrementar entre 1,5 y 2 veces, pero hay algunas que se sitúa incluso por debajo, lo cual “es una buena noticia”, si bien, ha querido precisar, tampoco puede descartarse una posible infraestimación de su prevalencia.
Respecto a las cuatro variantes que Sanidad estudia con atención junto a la británica, la sudafricana y la brasileña, el epidemiólogo ha señalado que "podría en principio favorecer el escape inmunitario".
Se trata de la variante P.2 (Río de Janeiro), de la que se han diagnosticado dos casos en viajeros en Madrid y otros 9 en Canarias de los que aún "no se dispone de datos epidemiológicos".
También se ha detectado otro caso de la variante nigeriana B.1.525, que fue secuenciado en enero de 2021; están además la VOC 202102/02, que se observó por primera vez en Bristol (Reino Unido), y la B.1.429, en California, de las cuales España no ha confirmado ningún caso aún.
De momento, y de acuerdo con la evidencia actual, “no parecen ocupar parte importante del espacio, pero no podemos descartarlo”, dijo Simón, que ha pedido esperar a tener más información para poder hacer una valoración más precisa.
Sobre si es factible que los países europeos puedan haber secuenciado el 5 % de los casos para el verano, el director del CCAES ha señalado que "muy pocos", como Reino Unido o Dinamarca, pueden hacerlo en la situación actual de transmisión; sin embargo, "es posible" si se mantiene la evolución descendente pueda alcanzarse.
Por otra parte, insistió en que el pasaporte COVID-19 es una cuestión que está desde hace meses en la mesa de los gobiernos europeos, pero aún hay que hacer “mucho trabajo de fondo”. “Esto es una cosa que tenemos en mente desde hace mucho tiempo y, de hecho, ya se piden pruebas PCR e incluso de antígenos”, expresó el epidemiólogo, quien consideró que, no obstante, “no hay que hacer bandera de esta acción porque no se va a desarrollar en un breve periodo de tiempo”.